Así lo expresó Juan José Sisca, representante de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (APIME), sobre los efectos de las políticas de ajuste implementadas por el Gobierno.
El sector de las pequeñas y medianas empresas (pymes) en Argentina atraviesa una crisis profunda tras el primer año de gestión de Javier Milei como presidente. Así lo expresó Juan José Sisca, representante de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (APIME), sobre los efectos de las políticas de ajuste implementadas por el Gobierno.
“Este primer año del Gobierno de Milei ha sido catastrófico para las pymes, la industria, la producción y el comercio”, afirmó Sisca en diálogo con el Informativo FARCO. También indicó que la caída sostenida de la actividad económica y la producción industrial confirma la gravedad de la situación. “Son 12 meses de caída continua que empiezan con la imposición de un modelo económico que ha tenido como objetivo la destrucción del mercado interno”, agregó.
Sisca resaltó que las medidas tomadas por el Gobierno impactaron de lleno en el poder adquisitivo de los salarios y jubilaciones, lo que dejó a las pymes sin un mercado consumidor. “El 99% de nuestra producción es para el mercado interno, y nosotros explicamos el 80% del trabajo privado en la Argentina y casi el 50% del Producto Bruto Interno”, explicó, y subrayó que estas cifras demuestran el rol crucial de las pymes en la economía del país.
Para el dirigente de APIME, las políticas implementadas responden a una estrategia clara: “Es una política breve, la de la destrucción del mercado interno”. Entre ellas, mencionó las primeras disposiciones del gobierno, como el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y la Ley de Bases donde ni siquiera se mencionaron términos como “industria nacional”, “producción”, “trabajo” o “pymes”.
En este contexto, también criticó la eliminación de herramientas que beneficiaban al sector, como la Ley de Compre Argentino. Estas iniciativas habían sido diseñadas para fortalecer a las pequeñas empresas y su participación en el mercado. “Todas las medidas que se tomaron favorecieron a los grupos económicos concentrados, el extractivismo y sectores como la energía, los granos y el litio, en detrimento de la población en general”, concluyó.