El secretario de Comercio, Matías Tombolini, sostuvo este lunes que el programa Precios Justos lanzado el viernes pasado tiene entre sus objetivos «continuar sumando empresas proveedoras» y «profundizar la dimensión regional» con la incorporación de más cadenas pequeñas y medianas de supermercados del interior del país.Tombolini destacó la buena recepción de la iniciativa por parte de la población y dijo al respecto que la aplicación habilitada para usar en celulares «tuvo 100.000 descargas el fin de semana, sin nada de publicidad, sólo con el boca a boca».
«Estamos muy enfocados en seguir profundizando la hoja de ruta del ministro (Sergio Massa), que a poco de asumir planteó un panorama que tenía que ver con lograr orden fiscal, acumulación de reservas y como se lograron ambas cosas, se puede avanzar con lo que tiene que ver con la política de precios», manifestó el funcionario en declaraciones a Radio 10.
«Estamos con cadenas que tienen alcance nacional, necesitamos sumar y ya están sumadas cadenas como El Zorzón en Chaco o La Reina en Rosario, pero necesitamos abordar todas las cadenas pequeñas del interior»
En ese sentido, indicó que el programa Precios Justos «tiene múltiples objetivos» y que el primero de ellos tiene que ver con «lograr este acuerdo que ya tiene más de 113 empresas, 1.823 productos que van a mantenerse a precios constantes en 2.500 bocas de expendio de 18 cadenas de supermercados, 9 cadenas mayoristas que se suman después de mucho tiempo, con 200 bocas y 25 cadenas locales del interior con más de 150 bocas».Otras de las metas es la de «terminar con la distorsión» de precios de un mismo producto entre los comercios que participan del programa y los que no forman parte, como los establecimientos de cercanía.
Tombolini señaló sobre el particular que «la distorsión es una característica natural de los formadores de precios, que cuando estaban en Precios Cuidados tenían un precio en el supermercado y otro en la boca de proximidad» y que en parte ese problema puede solucionarse con la incorporación de los mayoristas, algo que «no pasaba hace muchísimo tiempo».
Al respecto, planteó que como en muchos casos los comercios de cercanía se abastecen de mercadería provista por mayoristas que participan del programa, de manera indirecta se lograría incidir en sus precios, aunque no participen del programa.
«Se busca trabajar sobre las expectativas de inflación en función de un análisis que hicimos en la Secretaría sobre la estructura de costos de las empresas, dando cuenta de cómo va a ser para encontrar un vector que permita garantizar el abastecimiento mientras ordenamos los precios, al tiempo que cuidamos los dólares», manifestó el funcionario.
«La distorsión es una característica natural de los formadores de precios, que cuando estaban en Precios Cuidados tenían un precio en el supermercado y otro en la boca de proximidad»
Un tercer objetivo señalado por Tombolini es el de «continuar sumando empresas proveedoras y profundizar con las cadenas de supermercados del interior del país la dimensión regional, otro de los puntos que tenían que mejorar los programas anteriores».
«Estamos con cadenas que tienen alcance nacional, necesitamos sumar y ya están sumadas cadenas como El Zorzón en Chaco o La Reina en Rosario, pero necesitamos abordar todas las cadenas pequeñas del interior, que nos permitan llegar con una cuestión importante que es el control», remarcó.
Asimismo, puso de relieve la «descentralización» de las tareas de control y fiscalización mediante acuerdos con municipios, con los que se espera «sumar intendentes de todas las provincias».
Esos acuerdos, agregó, “les permiten también a las provincias desplegar programas propios, con empresas que van a dar productos a cadenas locales que no llegan a entrar en la dimensión nacional porque no tuvieron escala».