Entre los 49 proyectos de países confirmados que participarán de la próxima edición de la Bienal de Venecia 2024 además de Argentina, recientemente Singapur anunció que llevará la muestra «Observando el bosque», del artista Robert Zhao, cuyo foco en la resiliencia de una naturaleza que recupera su lugar, incluso en las urbes.La 60 Exposición Internacional de Arte de la Bienal de Venecia, que se desarrollará del 20 de abril al 24 de noviembre de 2024 en Italia, es uno de los eventos de arte contemporáneo más relevantes del mundo, que tiene la curaduría del brasileño Adriano Pedrosa y cuyo lema es: «Extranjeros en todas partes».
Así como con el proyecto «Ojalá se derrumben las puertas», de la argentina Luciana Lamothe, o «Ka’a Pûera: somos pájaros que caminan», de la artista Glicéria Tupinambá y miembros del pueblo Tupinambá de Brasil, el país del sudeste asiático dio a conocer el proyecto que presentará en la Sala de Armas del Arsenale, en Venecia.
El artista interdisciplinario Robert Zhao Renhui (Singapur, 1983) presentará en el pabellón de su país «Seeing Forest» (Observando el bosque) curada por Haeju Kim (Corea del Sur, 1980) del Museo de Arte de Singapur (SAM) inaugurado en 1996, institución que presentó el proyecto.
A su vez, el país insular asiático participa en la Bienal desde 2001.
En su trabajo Zhao explora la complejidad de las relaciones entre naturaleza y cultura con instalaciones, fotografía, video y esculturas, y su interés se centra en seres y objetos que constituyen lo viviente.
En concordancia con el lema de la bienal, Zhao homenajea «a los bosques libres y sin mestizaje que se encuentran a lo largo de los márgenes de nuestra vida urbana», indica el museo en su comunicado.
«A medida que el mundo entra en la era del Antropoceno y la humanidad se ve obligada a enfrentar el impacto del cambio climático, ´Seeing Forest´ suena como un llamado a prestar atención a los ecosistemas que nos rodean, mientras ofrece un faro de esperanza para que las comunidades tanto humanas y no humanas puedan coexistir en armonía».
«Cada bosque es liminal», esgrimen, «incluso uno que crece en el centro de la ciudad, ignorado y desechable en la planificación urbana, sigue siendo un universo en sí mismo».
«Seeing Forest» ofrece una evocadora exploración de los llamados bosques secundarios, esos espacios abandonados y deforestados que vuelven a crecer y son superados por la naturaleza, a menudo absorbidos por especies vegetales y animales introducidas en el país asiático en el siglo XIX.
Precisamente, la mirada del artista en su extensa investigación del medio se centra en los umbrales existentes entre los llamados bosques primarios y las áreas desarrolladas.
Zhao revela las interacciones y encuentros de la vida silvestre con la vida humana en estos sitios exuberantes pero abandonados, dando testimonio de la tenacidad de la naturaleza, e invita a explorar formas «en que el diseño urbano da forma al mundo natural resultando en un ecosistema de especies migrantes que se hace eco de las trayectorias y la composición de la población humana de la ciudad», indican.
En esos bosques donde se encuentran huellas del hombre en escombros y basura, tiendas abandonadas de trabajadores migrantes, por ejemplo, también hay vida.
Es así que con sus obras, la propuesta explora las historias menos conocidas de estos espacios de transición y sugiere «que el borde de una ciudad puede ser la frontera más intensa que existe».
Según el artista: «Los bosques secundarios son una segunda oportunidad para que la naturaleza encuentre una manera de recuperar su lugar después de las perturbaciones ambientales y humanas. Proporcionan un espacio radicalmente hospitalario para una variedad de sujetos vivos, donde los nuevos organismos son capaces de prosperar a pesar de la actividad humana, un cubo de basura abandonado, por ejemplo, se convierte en un abrevadero para las aves migrantes».
«Estos espacios también son ricos en historias y ecologías, y este interés ha impulsado la exploración de estos ecosistemas de múltiples capas en mi práctica durante los últimos siete años», define Zhao.
Por otro lado, desde otras propuestas, Chile presenta «Cosmonación», de la artista Valeria Montti Colque; España estará con «Pinacoteca migrante», de la artista peruana Sandra Gamarra y curaduría de Agustín Pérez Rubio; México expondrá «Nos marchábamos, regresábamos siempre», de Erick Meyenberg; Uruguay, el proyecto «Latente de Eduardo Cardozo; mientras que «Cosmic Traces» fue la elegida por Perú con obras fotográficas de Roberto Huarcaya.
La Bienal Venecia 2024, que se desarrollará en los Giardini, el Arsenale y diversas sedes de la célebre ciudad, recibirá la participación de numerosos países además de una exposición central, curada por Pedrosa que busca celebrar «lo extranjero, lo lejano, lo forastero, lo queer, así como lo autóctono», como refería el curador, el primer latinoamericano en ser curador de la bienal que tuvo su primera edición en 1895.