El Tribunal de Audiencia de La Pampa dará a conocer este jueves el veredicto del juicio por el crimen de Lucio Dupuy, cometido el 26 de noviembre de 2021 en Santa Rosa, en el que los jueces determinarán la autoría y responsabilidad penal de la madre del niño, Magdalena Espósito Valenti; y de su pareja, Abigail Páez; ambas acusadas y detenidas por el asesinato.Fuentes judiciales confirmaron a Télam que en la audiencia de cesura que comenzará a las 12 no estarán presentes las acusadas, y que los jueces Alejandra Ongaro, Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora resolverán si ambas son «culpables» o «no culpables» del delito de «homicidio calificado y abuso sexual ultrajante».
La pena no se dará a conocer este jueves mismo, sino en una audiencia posterior, aunque si el tribunal acepta los argumentos del Ministerio Público Fiscal (MPF), la única que les corresponderá a las acusadas es la de prisión perpetua, lo que hará irrelevante la segunda parte del juicio de cesura.
En caso de que el Tribunal valorara las pruebas de otra manera, tiene 15 días para dar a conocer la sentencia.
También deberá definir si aceptan la calificación de «crimen de odio» por razones de género, planteado por el abogado querellante, José Mario Aguerrido.
Fuentes judiciales informaron a Télam que, si bien en Santa Rosa es usual que los veredictos se den a conocer por escrito, en este caso se dispuso leerlo en la audiencia, a la que fueron convocadas las partes y a la que tendrá acceso la prensa.
Desde la mañana temprano, los familiares paternos de Lucio convocaron a una marcha en reclamo de justicia que se desarrollará en cercanías del palacio de justicia, que se encuentra totalmente vallado.
Las acusadas permanecerán alojadas en el Centro de Detención de la provincia de San Luis a la espera de la resolución del juicio.
Las declaraciones de las dos acusadas
Las dos acusadas por el crimen de Lucio Dupuy declararon durante el juicio que se desarrolló en Santa Rosa, y en ambos casos intentaron minimizar la participación en el hecho.
La madre de Lucio, Magdalena Espósito Valenti, apuntó contra el padre de su hijo, Christian Dupuy, y dijo al declarar en la última jornada del juicio: «Se me critica a mí, pero no al progenitor, porque decirle padre le queda grande. A él se lo justifica cuando la responsabilidad era de los dos. Sin embargo, en todo momento se desentendió de la criatura».
Durante su declaración, en la que no aceptó preguntas, la mujer de 25 años y quien vivía en Santa Rosa, recordó que esa mañana dejó a su hijo «con vida» al cuidado de su novia para irse a trabajar al Hotel Mercure, del Casino Club de Santa Rosa, y que «al día de hoy» sigue «sin poder creer» lo que le ocurrió.
Tras ello, afirmó que a su hijo lo «llora en privado» porque es «más humano que hacerlo delante de personas que no lo conocieron» y que dijeron «un montón de cosas» sobre su «supuesto rechazo a la maternidad».
Antes, el 7 de diciembre último, Abigail Páez, de 28 años, reconoció ante los jueces que golpeó a Lucio y dio detalles de la agresión: «Cuando llegué a la casa, lo vi a Lucio que se estaba mandando un moco. No importa qué, porque no viene al caso. Entonces lo tomé del brazo y le pegué varias pataditas en la cola. Fue todo muy rápido, no sé. Le pegué y no medí donde la verdad, ni sé por qué tampoco», contó, al tiempo que comenzó a llorar.
«No le encuentro una explicación todavía. Sé que lo lastimé, me di cuenta en el momento e intenté remediarlo. Luego, lo alcé y lo llevé a la ducha porque pensé que iba a reaccionar. Él intentaba hablar, estaba consciente todavía», agregó.
Luego dijo que vio que el niño «se estaba debilitando o desvaneciendo» por lo que lo tapó con su toallón y lo llevó a su pieza: «Lo senté en la cama y me fui a buscar ropa a su pieza para cambiarlo, lo más rápido posible porque era una situación muy desesperante en la que no sabía cómo reaccionar, ni que hacer para que él se recomponga», continuó.
Ante el silencio de toda la sala, Páez contó cómo Lucio perdió el conocimiento: «Cuando voy a buscar ropa para cambiarlo escucho un golpe y cuando vuelvo lo veo que él estaba tirado en el piso, sin reacción. De cara al piso. Ni siquiera había apoyado las manos. Como si estuviese desmayado, no sé. Entonces yo por el mismo temor lo toqué con el pie para ver si reaccionaba y vi que no tenía respuesta de él, entonces me acerqué y lo di vuelta, lo puse boca arriba», resaltó.
Páez dijo que intentó hacerle RCP, aunque no sabe si lo hizo bien o si pudo haberlo lastimado, tras lo cual lo llevó a la salita médica y desde allí al hospital, donde le dijeron que Lucio había fallecido.
Asesinato de Lucio
Lucio Dupuy (5) fue asesinado a golpes el 26 de noviembre de 2021 en la vivienda de la calle Allan Kardec al 2300 de la ciudad de Santa Rosa, donde residía con su madre y la pareja de ella.
Su mamá, Espósito Valente, fue acusada por el equipo de fiscales integrado por Walter Martos, Verónica Ferrero, Mónica Rivero y Máximo Paulucci, de los delitos de «abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por la ascendiente (progenitora), con el concurso de dos personas y aprovechando la convivencia con la víctima menor de 18 años, todo como delito continuado; en concurso real con homicidio calificado por ser la ascendiente, por ensañamiento y alevosía».
A Páez, en tanto, el MPF le imputa el «abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por la guardadora, con el concurso de dos personas y aprovechando la convivencia con la víctima menor de 18 años, todo como delito continuado; en concurso real con homicidio calificado por ensañamiento y alevosía».
La defensora oficial de Páez, Silvina Blanco Gómez, consideró por su parte que no existió un homicidio agravado sino un homicidio preterintencional, es decir que no tuvo intencionalidad, ya que la imputada -que admitió haberle pegado a Lucio- no buscó asesinarlo.
Por ese motivo, en su alegato, enumeró siete conductas que la imputada ejecutó para evitar la muerte del niño: la práctica de RCP para reanimarlo, su traslado a la posta sanitaria del barrio Atuel, la búsqueda de ayuda en la policía y haberlo llevado al hospital Evita, entre otras.
«Son conductas que deben ser valoradas como que no quiso matar», les manifestó la defensora a los jueces el tribunal, ante quienes, a su vez, cuestionó las conclusiones de la autopsia practicada a Lucio.
La defensa aseveró que «ninguna de las tres agravantes» planteadas por el MPF para el homicidio quedaron probadas y agregó que en el peor escenario pudo existir un homicidio simple con dolo eventual.
Con respecto a la acusación de abuso sexual, Blanco Gómez, pidió la absolución de Páez por el beneficio de la duda, al tiempo que aseveró que la mediatización del caso provocó un «estado de indefensión» en la imputada.
Operativo de seguridad para la lectura del veredicto
Las autoridades en seguridad de la provincia de La Pampa diagramaron para este jueves un operativo que se montó en los alrededores de los tribunales de Santa Rosa, donde desde la mañana se desarrollará una marcha en reclamo de justicia por el crimen de Lucio Dupuy que fue convocada por los familiares paternos del niño.
Según confirmaron las fuentes, la ausencia de las acusadas Magdalena Espósito Valenti y de su pareja, Abigail Páez, en el momento de la lectura de la sentencia morigeró el operativo de seguridad de la Policía de La Pampa.
«El Comando jefatura está planificando y diagramando un operativo conforme a las circunstancias del caso, en razón de que las imputadas no estarán presentes en la lectura del veredicto», informó a Télam una fuente del departamento de Relaciones Públicas de la Policía de La Pampa.
«Se tomarán todas las medidas de prevención para la preservación del orden y garantizar la tranquilidad de las personas que concurran a escuchar la sentencia en las inmediaciones de la ciudad judicial», añadió.
Para este jueves está prevista una marcha para acompañar a la familia Dupuy que fue convocada por Christian, padre de Lucio, a la que ya garantizaron su presencia la monja Martha Pelloni y personas de La Pampa, Córdoba, Mendoza y Santa Fe.
Por su parte, el defensor oficial Pablo De Biasi pidió la absolución de la madre de Lucio por ambos delitos, ya que «en el lugar de los hechos hubo una persona y no dos», al descartar la coautoría del homicidio.
«La única testigo fue Abigail», acotó, al tiempo que descartó cualquier responsabilidad de la madre por omisión.
En su alegato, el defensor planteó que, en forma subsidiaria, si la madre de Lucio fuera hallada culpable, solo podría imputársele una conducta preterintencional.
También manifestó que la fiscalía y la querella efectuaron «muchos recortes» a los hechos para encuadrarlos en sus teorías y agregó que durante el proceso se diluyó la responsabilidad del padre en el cuidado de Lucio.
El médico forense que hizo la autopsia al cuerpo de Lucio contó antes del juicio que «en 27 años de profesión» y tras haber intervenido en «32 casos de niños golpeados» nunca vio algo así.
En tanto, la familia paterna del niño, representada por el abogado Mario Aguerrido, adelantó a Télam que denunciará al Ministerio de Salud provincial por no haber actuado ante situaciones de violencia previas sufridas por el niño y atendidas en hospitales de la provincia, al tiempo que pidió el juicio político para la jueza Ana Clara Pérez Ballester, quien le dio la tenencia del niño a su madre a pesar de que estuvo ausente dos años.
A raíz del caso de Lucio, a fines de noviembre pasado, un plenario de comisiones de Legislación General, Educación y Cultura, y Población y Desarrollo Humano del Senado dio dictamen favorable a un proyecto de ley que crea un Plan Federal de capacitación para el personal del Estado sobre derechos de niñas, niños y adolescentes.
Y el 26 pasado, mediante la publicación en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional decretó la ampliación del temario de las sesiones extraordinarias para incluir el tratamiento del proyecto, denominado «Ley Lucio».
Además, casi 148 mil personas adhirieron a una petición que fue lanzada en la plataforma Change.org (Change.org/JusticiaPorLucio) que exige «¡Justicia por Lucio! Condenen a toda la cadena de responsables del crimen».