La Justicia confirmó el procesamiento con prisión preventiva y un embargo de 30 millones de pesos para la mujer de 51 años que fue detenida en octubre pasado, acusada de haber seducido a través de aplicaciones de citas y robado a 10 hombres de la Ciudad de Buenos Aires y de haberse comprado con el botín obtenido unos 35 vehículos y hasta un centro de estética en el partido bonaerense de San Fernando, informaron fuentes judiciales.La decisión fue adoptada por la sala IV de la Cámara Nacional en lo Criminal, que confirmó el procesamiento que había firmado el 11 de octubre pasado el juez en lo Criminal 4, Martín Yadarola, para Marta Beatríz More (51), a quien acusó de haber cometido diez hechos ocurridos entre mayo del 2018 y marzo del 2022, en los que utilizaba un analgésico del tipo opioide para sedar a sus víctimas, a quienes conocía a través de una página web «Zona Citas» y «Badoo», y poder robarles en sus casas.
More está acusada del delito de «robo reiterado en diez oportunidades» y, de esta manera, permanecerá detenida, ya que para los camaristas, si la acusada recupera su libertad «podría entorpecer la pesquisa o profugarse».
Según el fallo de la cámara al que accedió Télam, «en todos los casos, More conocía a sus víctimas (todas ellas hombres y mayores de 65 años) a través de una página web de citas, donde se daba a conocer bajo otra identidad, se reunían en algún bar o restaurante y más tarde acudían a los domicilios de los damnificados, donde ingerían bebidas a las que la imputada le colocaba alguna sustancia que provocaba que se quedaran casi de inmediato dormidos o perdieran el conocimiento».
De acuerdo a la pesquisa, la procesada «aprovechaba entonces para desapoderarlas de dinero y otros elementos de valor y luego huir».
Los diez hechos
Según la resolución judicial, en el primero de los hechos, ocurrido el 13 de mayo del 2018 a las 18, la acusada se hizo llamar «Bety» y engañó a un hombre, a quien conoció mediante la aplicación «Zona Citas» y acordó un encuentro en Cabildo y Juramento, en Belgrano, desde donde se dirigieron al domicilio de la víctima en la calle Galicia, en Flores.Allí, la mujer le ofreció mate cocido y, tras beberlo, el hombre se quedó dormido, tras lo cual la mujer le robó 3.500 pesos, tres pares de zapatillas, una notebook, una tablet, un teléfono celular, una valija, perfumes importados y hasta una filmadora.
De acuerdo a los investigadores, en el segundo hecho que se registró el 27 de agosto del 2018, la mujer se hizo llamar «Graciela», pactó un encuentro con un hombre -su identidad se protege para no exponerlo- en Callao y Corrientes y concurrió a un domicilio en la calle Bartolomé Mitre al 2900, donde lo drogó y le robó 51.000 pesos, 450 dólares y todos los objetos de valor que encontró.
En ese caso, también le robaron la tarjeta de débito y le realizaron extracciones en cajeros automáticos de su cuenta bancaria.
El tercer hecho que se le imputa ocurrió el 11 de octubre del 2019 y la modalidad fue la misma. Al hombre estafado, además de golpearlo en la cabeza, le robó dinero y la tarjeta de débito, con la cual también extrajo dinero en al menos cuatro oportunidades.
El 29 de octubre se registró el cuarto caso y la víctima fue un hombre a quien la acusada, que se hizo llamar «Mary», le sustrajo 84.000 dólares, 3.000 pesos, un teléfono celular, un reloj de oro de bolsillo, varias cadenas de oro, un anillo de platino y un reloj de bolsillo antiguo de oro.
El quinto fue en octubre del 2020, el sexto en noviembre del 2020, el séptimo en junio del 2021 (aquí se apoderó de 15.124 dólares y 185.000 pesos), el octavo en agosto del 2021 (de donde se llevó 30.000 dólares y 10.000 pesos, además de relojes y joyas), el noveno en enero del 2022 (robó 20.000 dólares, joyas y un reloj) y el último en marzo de este año (donde sustrajo 20.000 dólares y objetos de valor).
Allanamiento
La acusada logró ser identificada en base a las declaraciones de las víctimas y por el análisis de las filmaciones de distintas cámaras de seguridad por parte de efectivos de la Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja y su Secretaría de Investigaciones Penales (SIPE).
Además, una de las claves fue que la acusada quedó filmada por cámaras de seguridad del Hipódromo de Palermo, hasta donde fue con una de sus víctimas y retiró dinero de un cajero automático en el subsuelo del sector casino, con lo que sus datos personales pudieron ser descubiertos.
De inmediato, el juez Yadarola ordenó un allanamiento en la casa de More, en Urcola 3545, de San Fernando, donde se la detuvo y se le secuestraron muchos de los objetos robados.
Allí, según los camaristas que confirmaron el procesamiento de More, los policías secuestraron un medicamento llamado “Calmador Tramadol HCI 5%” con el que, de acuerdo al Cuerpo Médico Forense, «es una droga analgésica del tipo opioide que puede provocar sedación y somnolencia, mayormente cuando se la combina con otros depresores del sistema nervioso central, como el alcohol».
En la resolución, los camaristas Ignacio Rodríguez Varela y Pablo Lucero consideraron para confirmar el procesamiento de More que «se pondera la gravedad de los sucesos, en tanto accedió a los domicilios de las víctimas, todas ellas mayores de 65 años, a quienes intoxicó y provocó en algunos casos su internación, dejándolas inermes y expuestas además a lesiones por las caídas en la inconsciencia, así como por su conducta posterior, donde aprovechó su privación de toda defensa para despojarlas de sus bienes».
«Además de la preparación fría y minuciosa de sus maniobras, con considerable despliegue de medios, pues usaba plataformas de citas, también engañó y reiteró los hechos, sujeto solo a que se le presentaran circunstancias y damnificados propicios», dijeron los camaristas.