EL 25 DE AGOSTO DE 2022 COMENZÓ EL TRASLADO PROGRESIVO DEL VIEJO PRESIDIO DE AVENIDA 3 DE ABRIL A LAS INSTALACIONES UBICADAS ENTRE LAGUNA BRAVA Y SAN CAYETANO. ALLÍ LOS MÁS DE 600 PRESIDIARIOS FUERON RELOCALIZADOS. DESDE ENTONCES, LOS HECHOS DE VIOLENCIA TIPO MOTÍN SE HAN REDUCIDO, PERO NO LAS MUERTES.
La Penitenciaría de Corrientes fue escenario de la muerte de un preso de 25 años, quien cumplía una condena de 6 años por intento de homicidio en la Capital, dictada el 13 noviembre de 2020 por el Tribunal Oral Penal 2. La persona fue identificada como Claudio García Bogarín, quien se convirtió en el noveno hombre fallecido en las instalaciones penitenciarias desde su puesta en funcionamiento en agosto de 2022. El dato cobra relevancia si se lo compara con el ritmo de muertes que se registraba en la vieja Unidad Penal 1, ubicada al costado de la explanada del puente interprovincial. En ese lugar -hoy en plena remoción para convertirse en centro recreativo y «polo tecnológico»- hubo al menos 17 muertes desde 2004 hasta su cierre definitivo 18 años después. Es decir que la frecuencia era de 1 muerte por año y ahora es de 3 por año, lo que resulta un aumento significativo y proporcional a la disminución de los motines a los que la vieja penitenciaría tuvo acostumbradas a las autoridades penitenciarias y policiales. Actualmente la población penal es de 770, está al máximo de su capacidad.
La información respecto a lo sucedido con García Bogarín en el interior del complejo penal ubicado en la Ruta Provincial 44 da cuenta de que fue hallado sin vida en su celda por sus compañeros de pabellón, que dieron aviso a la guardia del Servicio Penitenciario Provincial. Por razones de jurisdicción intervino la Comisaría 20ª, cuyo personal ingresó al presidio y constató el hallazgo, procediendo a su retiro para la realización de la autopsia correspondiente. El resultado preliminar del peritaje descartó la intervención de terceros en el hecho. No obstante se prosigue con las diligencias correspondientes a instancias de la autoridad judicial en turno y con competencia en el hecho.
Respecto a los antecedentes de García Bogarín, consta en la base datos del Poder Judicial que tuvo al menos tres causas judiciales que llegaron a la instancia del juicio pese a que por entonces apenas superaba los 20 años de edad. La más grave fue por un intento de asesinato. El mismo se registró en la madrugada de 1 de junio de 2019 en la esquina de Magallanes e Irala, en el barrio Juan de Vera, donde García Bogarín apuñaló por la espalda a otro joven, identificado como Waldino Pared, con quien mantuvo una discusión en dicha intersección en donde funcionaba un maxikiosco 24 horas. Bogarín fue capturado al día siguiente luego de que los familiares de Pared intentaran lincharlo y se resistiera a ser aprehendido por personal policial, empleando una barra de hierro. Al declarar en el juicio, el acusado se abstuvo. En el fallo 135/20 también se consigna que el imputado «padece de consumo problemático hace varios años y no ha logrado realizar tratamiento de rehabilitación». Al momento de fallecer Bogarín ya había cumplido 4 años desde la condena y 5 desde el momento en que fue arrestado. Si bien aún le faltaba un año para completar el monto total de la sentencia, ya estaba en condiciones de acceder a los beneficios de la semilibertad, por haber cumplido más de dos tercios de la pena. Se desconoce si llegó a solicitarlos a la jueza de Ejecución.