La medida se tomó luego de que el caso cobrara gran repercusión en la provincia y en medios nacionales.
Policías separados de sus funciones mientras avanza la investigación por la agresión a un ciudadano en Santa Cruz; el caso generó amplio repudio y debate sobre el accionar de las fuerzas de seguridad.
En diálogo con Radio LU12 AM680 de Río Gallegos, Carrizo volvió a describir la traumática situación ocurrida en la madrugada del sábado 23 de agosto. El artista, ganador de un Pre Cosquín y con una extensa trayectoria, confesó que aún siente “mucha ansiedad y miedo” por las secuelas del ataque.
El músico regresaba de una presentación en Las Heras junto a su hermano cuando se produjo el incidente. En sus primeras declaraciones en redes sociales, Carrizo relató que trató de evitar un control de alcoholemia, lo que desencadenó la reacción desmedida de los policías, quienes lo agredieron de manera brutal, afectando gravemente su ojo izquierdo.
Según informó, recién pudo abrir el ojo dañado este miércoles, aunque los médicos todavía deben evaluar las posibles secuelas permanentes. A pocos días del hecho, Carrizo mantiene el temor de perder completamente la visión.
“Intentaron matarme”
El músico detalló los momentos previos al ataque: “Cuando me hicieron señales para detenerme, tiraron algo contra el auto. Sentí un golpe fuerte y pensé ‘acá nos matan a golpes’ y seguí. Quise salir del vehículo y caminar, pero apenas avancé un metro, no veía nada, solo un 10%. No entendía lo que pasaba”.
Carrizo afirmó que todos los golpes estaban dirigidos a su cabeza y describió la violencia del ataque como extrema. “La intención fue matarme. A patadas o con el arma, no lo sé porque no recuerdo nada”, aseguró.
También denunció que los demás policías de la Comisaría Segunda no intervinieron durante la golpiza. “Me retuvieron seis horas sin dejarme hablar ni tomar agua. A mi hermano lo redujeron y lo subieron a la camioneta como si fuese un animal”, relató.
A pesar de la separación de los oficiales involucrados, el músico consideró insuficientes las medidas adoptadas: “Que me pidan disculpas y digan que los apartan no alcanza. Hay que meterlos presos. Había muchos policías presentes que vieron todo y no hicieron nada. Fueron cómplices”, sostuvo.
Una de las principales preocupaciones de Carrizo es la calificación del hecho: “Fui a la Fiscalía y me dijeron que lo tramitan como lesiones leves, y no fue así. Estoy cada vez más asustado”, lamentó.
El artista destacó, en contrapartida, el apoyo recibido de la comunidad tras viralizarse el caso: “Mi trayectoria me permitió conocer gente que me ayudó y se difundió mi historia, repudiando lo sucedido. Estoy muy agradecido con todos”.
Este episodio generó indignación y debate, especialmente porque se produjo poco después de un caso similar en Santa Cruz, donde un video mostraba a varios policías golpeando a un joven detenido en Río Gallegos. Ambos hechos reavivaron la discusión sobre el accionar de las fuerzas de seguridad provinciales.