Con la presencia de escritoras como Camila Sosa Villada, cine en la playa las noches de luna llena, el regreso del novedoso proyecto librero Te llamaré viernes -que este año incluirá una suerte de feria balnearia-, un taller artístico para construir máquinas de mirar y muestras como la fotográfica PH15, un colectivo artístico de integración social que este verano expone de la mano de dibujantes como Liniers, vuelve el ciclo cultural que ya es un clásico de veraneo en el Viejo Hotel Ostende (VHO).«Coincidir es una acción y en su infinitivo, una potencia» es el nombre del ciclo co-creado con Fundación Medifé que esta temporada tomará el balneario e interiores del antiguo hotel que en 2023 cumplirá 110 años de historia. Nacido en 1913, antes que Pinamar y Villa Gesell, cuando ese punto del Atlántico se parecía más a un páramo silvestre de viento y médanos que un centro de descanso para porteños y bonaerenses más cercano que Mar del Plata.
En su etimología, esa palabra tiene tres temas que le interesan tanto a Roxana Salpeter, responsable del VHO como para la gente de Medifé, para esta experiencia del verano: «‘con’, nombra lo importante que es estar con ‘otrxs’, ‘in’ refiere a un interior, cierta reflexividad, y ‘cadere’, caer». Algo así como «dejarse caer este verano, aprovechar el tiempo de menos ajetreo para volcarse hacia adentro y escucharnos, acercarnos alguna experiencia bella y pensar que hay un punto -siempre- en el que se puede encontrar alguna coincidencia».
Pero además »festejar el hallazgo», señalan sobre esas coincidencias que llevarán a Juan Mattio, por ejemplo, a ser entrevistado ante lectores propios y ajenos en el jardín balneario del Viejo Hotel -el 9 de febrero a las 18, Garay y Rambla Sud- sobre ese libro hermoso y tremendo sobre la locura y la palabra, o sobre una madre y un hijo, que fue «Materiales para una pesadilla», premio Filba-Medifé 2022. O el adelanto que hará Julián López de una novedad, su nueva novela «El bosque infinitesimal», el día 20 a las 18 en el mismo lugar.
Son «tiempos que requieren mucho de todxs» y «entendemos que puede haber maneras más amigables y desafiantes de estar juntxs», un espacio común para la voluntad de disfrutar y de alcanzar algún bienestar«, explican sobre esas jornadas que, siempre como invitación abierta y gratuita, y en lo que a visitas literarias se refieren, siempre en la playa también, abrirán en el atardecer del 21 de enero (19.30 horas), con una lectura pública de Camila Sosa Villada frente al mar, de fragmentos de sus libros «Las malas», «La novia de Sandro» y «Soy una tonta por quererte».
No faltará en enero música y llegará de la mano de Daniela Horovitz con la presentación de Bellezas iluminadas, el 11 de enero a las 19.30 en el jardín balneario del hotel, donde la cantante y compositora realizará un viaje íntimo y poético a través de sus canciones.
«Este es el verdadero retorno a la presencialidad -dice a Télam Roxana Salpeter, responsable del histórico hotel por el que pasaron escritores como Silvina Ocampo y Adolfo Bioy Casares-, 2022 fue una temporada complicada por sus vericuetos, hubo presencialidad pero con el ramalazo del Covid al que sobrevivimos, pero hubo que ajustar sobre la marcha protocolos y contramarchas. En el microclima del hotel salió bien, pero fue un estresazo; como vivir dos temporadas en una. Bueno, 2023 será otra cosa», promete.
En ese sentido destaca: «Acá estamos muy entusiasmados con esta nueva temporada, ya iniciada desde el 16 de diciembre, ya se están yendo los que pasaron Navidad y empezaron a llegar los que estarán en Año Nuevo y los que pasarán su veraneo. La principal coincidencia entre los organizadores de este ciclo 2023 está en las maneras de mirar el mundo y estas actividades públicas y gratuitas son nuestro pequeño aporte».
La grilla arranca con un retorno dulce y esperado. Aquella primera muestra que por 2016 mostraba en los salones del hotel fotos tomadas por chicos de 10 a 20 años de Ciudad Oculta, una de las villas de emergencia más populosas del país, en el marco del taller de la Fundación PH15 y reinterpretadas por dibujantes como Liniers o Vero Gatti, vuelve con la tercera pata que le aportó la editora Silvia Gruppo cuando a esas recreaciones le sumó textos de escritoras como Marina Mariasch, Pía Bouzas y Ana Ojeda o Mariano Quirós.
Si antes fueron más de 12 dípticos llamados «Grandes ilustradores, pequeños fotógrafos», ahora son más de 12 trípticos que llevan por título «Tres historias en un click», parte 2, porque otra parte de esos trípticos ya había llegado al hotel en 2019.
Ph15 es un espacio donde niños y adolescentes aprenden a miran lo que los rodea y lo que llevan dentro para expresar quiénes son y lo que sienten a través de imágenes construidas con luces y sombras. Ph significa photography, que a su vez quiere decir dibujar con luz, y 15 es el número que identifica a la villa, de donde los fotógrafos son, adonde recaló el taller creado hace 22 años en plena crisis sociopolítica de 2001, con la idea de encontrar lo bello y generar una herramienta de inclusión social, si no para trabajar a partir de la fotografía, para aprender nuevas formas de mirar y pensar, empezando por casa.
«El mayor desafío ahora es la subsistencia, volver con los talleres anuales anulados en pandemia y seguir con proyectos como Traductor Visual que este año nos llevará a Bariloche a trabajar con niños mapuches», dice Moira Rubio Brennan, codirectora, junto a Miriam Priotti, de la fundación con la que se puede colaborar a través de su sitio web y que desde su creación trabajó en más de 200 barrios y comunidades de Ushuaia a La Quiaca, con más de tres mil 500 chicos que produjeron más de 40 mil imágenes.
En el hotel habrá algunos de los libros álbum «3 historias en un 1 clic» publicados por el sello independiente 27 Pulqui, Fa Editora y Fundación Gráfica Campichuelo, en el que intervinieron más de 150 fotógrafos, escritores y dibujantes; también habrá posters ampliando la exposición.
«Te llamaré viernes» también regresa y reabre para los veraneantes, el proyecto librero que, unido al legado al legado de la escritora española Almudena Grandes (1960-2021) cuyo título de una de sus novelas da nombre al proyecto, y al deseo de dos amantes de los libros, llevó por primera vez una librería a la localidad costera de Ostende con un catálogo de novedades y particularidades pensado para turistas y veraneantes pero también para los propios. «El año pasado trascendió a los huéspedes del hotel y fue muy bien recibida, nos gusta mucho la idea de haber sido un hotel con biblioteca y ahora y con librería», dice Salpeter.
El 13 y 14 de enero de 13 a 19 en el jardín del parador habrá una venta al público. «El año pasado, pese a las restricciones que aún había por pandemia, tuvimos una experiencia hermosa y enriquecedora, comprobamos la importancia de la labor librera: la gente quiere conversar, intercambiar ideas y lecturas y recibir recomendaciones. Algo que como profesionales del mundo editorial ya sabíamos pero que el proyecto nos mostró con contundencia», dice Paulina Cossi, otra de las imulsoras del proyecto.
Martes y jueves de enero y febrero a las 17 habrá visitas guiadas por el hotel, viajando entre el presente y el pasado de 100 años de historia, rememorando anécdotas y acontecimientos
«Esta temporada lanzamos el sitio web donde se puede ver el catálogo completo con los títulos que se pueden comprar solo en el hotel, www.tellamareviernes.com.ar, y en el balneario del Viejo Hotel Ostende repetiremos ese encuentro con los lectores», recuerda.Martes y jueves de enero y febrero a las 17, en tanto, habrá visitas guiadas por el hotel, viajando entre el presente y el pasado de 100 años de historia, rememorando anécdotas y acontecimientos.
Mientras que a las 20 de la Noche de Reyes y con la primera luna llena del año -reposeras y lonas sobre la arena del balneario mediante- abrirá el Cinemar (se suspende por lluvia) con la proyección de la comedia «Clementina», de la productora El Pampero Cine.
Y continuará el 5 de febrero a las 20, segunda noche de luna llena del año, con un homenaje a los pioneros del cine Georges Méliès, Segundo de Chomón, Fritz Lang en la proyección de «El sueño del astrónomo» (1898), «El viaje a la luna» (1902), «Viaje a Júpiter» (1908) y el trailer de «La mujer en la luna» (1929) a cargo de la compañía Máquinas de mirar que tiene por objetivo difundir, promover y acercar a chicos y grandes a la etapa previa al nacimiento del cine, reivindicando las antiguas técnicas de animación como puente para comprender las tecnologías del presente mediante el juego y la creatividad.
De hecho, serán ellos los responsables de taller de construcción de caleidoscopios para mirar la luna que el sábado 4 de febrero a las 18 se hará en el balneario del viejo hotel con previa inscripción en recepcionvho@telpin.com.ar, y del de arte cinético que se hará el domingo 5 de febrero a las 19.