Maduro pidió al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) «certificar» el resultado de las elecciones del 28 de julio, en las que el Consejo Nacional Electoral (CNE) lo proclamó vencedor con 52% de los votos. La oposición asegura haber ganado los comicios y acusa tanto al TSJ como al CNE de servir al chavismo.
Desde Santiago, el presidente de Chile, Gabriel Boric, cargó contra el gobierno de Maduro. «Hoy el TSJ de Venezuela termina de consolidar el fraude. El régimen de Maduro obviamente acoge con entusiasmo su sentencia que estará signada por la infamia. No hay duda que estamos frente a una dictadura que falsea elecciones, reprime al que piensa distinto y es indiferente ante el exilio más grande del mundo solo comparable con el de Siria producto de una guerra».
«He visto a los ojos a miles de venezolanos que claman democracia su patria y que hoy reciben un nuevo portazo. Chile no reconoce este falso triunfo autoproclamado de Maduro y compañía», agregó.
Hoy el TSJ de Venezuela termina de consolidar el fraude. El régimen de Maduro obviamente acoge con entusiasmo su sentencia que estará signada por la infamia. No hay duda que estamos frente a una dictadura que falsea elecciones, reprime al que piensa distinto y es indiferente ante…
— Gabriel Boric Font (@GabrielBoric) August 22, 2024
Boric señaló además que «seguro por nuestra postura recibiremos (como es costumbre) insultos por parte de sus autoridades. No saben que como decía Huidobro “el adjetivo cuando no da vida, mata”, y ellos han asesinado la palabra democracia».
«La dictadura de Venezuela no es la izquierda. Es posible y necesaria una izquierda continental profundamente democrática y que respete los derechos humanos sin importar el color de quien los vulnere. Un progresismo transformador que mejore las condiciones de vida de su pueblo construyendo comunidad en vez de individualismo, encuentro por sobre polarización. Hacia allá caminamos en Chile», finalizó.
«Certifica de forma inobjetable el material electoral peritado y convalida esta sala los resultados de la elección presidencial del 28 de julio del 2024, emitidos por el Consejo Nacional Electoral, donde resultó electo el ciudadano Nicolás Maduro Moros como presidente de la República Bolivariana de Venezuela para el período constitucional 2025-2031. Así se decide», rezó la sentencia que leyó Caryslia Rodríguez, presidenta de la máxima corte.
La intervención del máximo Tribunal, que fue solicitada por Maduro, ha sido cuestionada por observadores locales y extranjeros que dudan de la independencia del organismo y aseguran que no tiene competencia electoral.
Maduro fue declarado vencedor por el CNE, donde el oficialismo es mayoría desde hace más de dos décadas, aunque el organismo no ha publicado hasta el momento las actas con los resultados a pesar de las crecientes exigencias de la oposición y la comunidad internacional para que sean divulgadas detalladamente.
La llamada Plataforma Unitaria —que representa a los principales partidos opositores— ha dado a conocer las actas que, aseguran, muestran que su abanderado Edmundo González obtuvo significativamente más votos que el gobernante.
Uruguay también critica
El canciller de Uruguay, Omar Paganini, aseguró que el fallo del Tribunal Supremo «de ninguna manera» es un pronunciamiento creíble. «Esto indica que una vez más que el régimen se dedica a desconocer todos los llamados de la comunidad internacional a que realice una constatación de los datos de las actas que demuestre con información detallada lo que se proclama», puntualizó el ministro de Relaciones Exteriores, quien agregó que se encuentra muy preocupado.
Añadió que lo que se vio es «todo lo contrario» con un organismo, que no es el constitucionalmente competente para intervenir en dicho episodio, «que proclama en forma inapelable la victoria de Maduro sin dar explicaciones sólidas al respecto».
«Todos sabemos además que en Venezuela estos organismos no son independientes del Poder Ejecutivo, de manera que es un organismo que depende de Maduro, que está avalando que el propio Maduro sale reelecto. Claramente no se trata de un pronunciamiento creíble de ninguna manera», enfatizó
Asimismo, detalló que el fallo «indica la voluntad del régimen de no hacer lo que tiene que hacer», que es «reconocer que perdió las elecciones y abrir un proceso de transición hacia la democracia».
Paganini recordó que la comunicad internacional está completamente convencida que el proceso de elecciones «fue fraudulento».