El total de cargos políticos, es decir los comprendidos desde el nivel de subsecretario para arriba, crecieron a un ritmo que contradice la reducción de ministerios que realizó el Gobierno libertario. Esto significa que el presidente concentra cada vez más funciones bajo su órbita. Su hermana Karina es quien absorbió la mayor cantidad de funciones en la Secretaría General de la presidencia.
De acuerdo a un informe del politólogo Pablo Salinas, las secretarías que dependen del presidente se incrementaron un 159% en comparación a la gestión de Alberto Fernández. «Si bien el Gobierno de Milei redujo casi un 20% los cargos políticos totales del organigrama (se pasa de 479 a 385), destaca el peso sobre el total que tiene Presidencia: concentra el 15% de cargos políticos totales, siendo solo superado por el Ministerio de Economía, con 34%», dijo Salinas.
A esta realidad se suma, por ejemplo, que los hombre elegidos por el Gobierno de Javier Milei también acuden a viejas prácticas políticas de lo que ellos llaman «la casta». Ejemplo de ello es que a una semana de asumir en Aerolíneas, De Marchi pidió pasajes en business y se tomó un finde largo. El flamante vice de la empresa que Milei quiere privatizar usó un beneficio para viajar en ejecutivo por 25.000 pesos.