El hijo de una concejala fue asesinado de un tiro, mientras que el de una fiscal resultó herido de otro balazo, al ser atacados en un campo de la localidad bonaerense de Saladillo por un joven de 19 años, hijo del dueño del predio, informaron fuentes judiciales y policiales.
Por el caso, también quedó detenido el dueño del campo y padre del presunto tirador, acusado por la tenencia y la portación ilegal de las armas empleadas en el hecho, añadieron los voceros.
El joven fallecido fue identificado por las fuentes como Lorenzo King (37), hijo de la concejala de Saladillo Silvina Cotignola (Frente de Todos), mientras que el herido es Tomás Matías Santopolo (31), guardavidas e hijo de la fiscal de esa ciudad, Patricia Hortel.
En tanto, el principal imputado, quien quedó detenido acusado de homicidio y tentativa de homicidio, es Joaquín Salgado (19), y el segundo aprehendido es su padre, Ezequiel Emilio Salgado (46).
La intervención policial se inició alrededor de las 7 del domingo en el hospital de Saladillo, donde ingresaron heridos de bala tanto King, con una herida en el abdomen que luego le causó la muerte, y Santopolo, con otra superficial en uno de sus brazos.
Según las fuentes, el hecho ocurrió en el establecimiento rural «San José», propiedad de los Salgado, está situado en Cuartel IX, paraje El Mangrullo, a unos 40 kilómetros del caso urbano de Saladillo, a la altura del kilómetro 209 de la ruta 205.
Todos conocidos
Las fuentes explicaron que tanto víctimas como imputados «se conocían» y estaban reunidos en un quincho donde ensayaban, ya que todos son músicos y tienen una banda de rock.»Todo hace indicar que estuvieron consumiendo alcohol y drogas, y, aparentemente, eso incidió para que el joven Salgado entrara a la cocina con una de las armas que allí había cargadas y en disposición inmediata de uso y abriera fuego contra sus conocidos», dijo a Télam una fuente judicial.
Fue Salgado padre quien trasladó a los baleados en una camioneta hasta el hospital de Saladillo, mientras su hijo Joaquín fue detenido más tarde, cuando llegó al campo personal de la comisaría de Saladillo.
En el lugar del hecho, la policía secuestró una pistola marca Bersa calibre .40 -es la que se cree empleó el imputado para balear a sus conocidos- y una escopeta Maverick calibre 12.
También fue requisada en el hospital a donde había llevado a los heridos, la camioneta Hyundai Tucson propiedad de Salgado padre, y allí se incautó un revólver Smith & Wesson calibre 38.
Los restos de King, quien además de músico era chef y había trabajado como guardavidas, fueron inhumados este lunes a la mañana en el cementerio de Saladillo y su padre habló con Télam.
Reclaman justicia
«Mi hijo tocaba la guitarra muy bien. Me había contado que no hacía mucho que se frecuentaba y quería tocar con esta gente. Todavía no sabemos muy bien qué sucedió, pero Tomás, el amigo de mi hijo que resultó herido, me dijo que en un momento apareció el hijo del dueño del campo con un arma y empezó a tirar», contó King.
«Cualquiera puede decir quién era Lorenzo, un pibe de bien. Ahora vengo de enterrarlo y lo único que quiero es que se haga justicia», reclamó el papá del joven asesinado.
Si bien el padre de la víctima fue quien había señalado en sus redes sociales que los imputados son parientes de la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, la propia magistrada desmintió a esta agencia esa información.
«No tengo familiares en Saladillo, la información es falsa. No tengo familiares que se llamen Ezequiel ni Joaquín», aclaró Arroyo Salgado en diálogo con Télam.
El padre de King reveló que los ahora dos imputados eran quienes «decían que era parientes de la jueza» y agregó: «A mí particularmente me lo dijo el padre, con quien estuve en tres o cuatro oportunidades».
El caso es investigado por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Saladillo, que naturalmente es la fiscalía de la madre del herido, pero en este momento es subrogada por la fiscal Norma Pippo, de Cañuelas, quien se quedará con la instrucción de la causa.
Pippo dejó aprehendidos a los dos Salgado: Joaquín como presunto autor del «homicidio» de King y la «tentativa de homicidio» de Santopolo, y su padre Ezequiel por la «tenencia y portación de arma de guerra».
«Tenía alguna documentación de las armas pero toda vencida de hace mucho tiempo», señaló un vocero judicial.
Padre e hijo fueron indagados por esos delitos y se negaron a declarar ante la fiscal Pippo, quien luego pidió ante el juzgado de Garantías la detención formal de ambos, confiaron fuentes judiciales.
A su vez, la fiscal ordenó que se realicen análisis de sangre para ambos imputados.
El bloque del Frente de Todos del Saladillo, emitió un comunicado en el lamentó el episodio y se solidariza con la concejala madre de la víctima.
«Concejales y concejalas del Frente de Todos expresan su más sentido pésame a su compañera concejala Silvina Cotignola, y en ella a toda su familia y seres queridos, acompañándola en este momento de pérdida y dolor irreparables», señala el texto.