El arquero de River superó con rapidez el dolor de la final perdida ante Barcelona de España en Japón y se concentró en las buenas sensaciones vividas durante su experiencia en el Mundial de Clubes.
«Este torneo lo disfruté mucho desde el primer día que llegamos a Japón. Cuando uno ve todo lo que se genera al estar acá, debe valorarlo, más allá de que hoy lo único que queríamos era ganar», afirmó el cordobés, de 31 años, que lleva tres temporadas y media en Núñez.
El ex futbolista de Vélez Sarsfield destacó que River, último campeón de la Copa Libertadores de América, «tuvo la posibilidad de medirse ante los mejores» y demostrar que estuvo «a la altura» de la máxima competencia FIFA a nivel clubes.
«Por eso tenemos que sentirnos tranquilos. Por el orgullo que nos caracteriza, nosotros nunca nos sentimos menos que nadie, pero Barcelona tiene una línea de juego que respeta hace muchos años y cuenta con los mejores jugadores del mundo», concluyó.