Los 11 policías detenidos por el asesinato del empleado de una fábrica de gaseosas que fue baleado el pasado lunes durante un procedimiento en el partido bonaerense de La Matanza negaron haberlo matado, por lo que la Justicia aguarda los resultados de los peritajes balísticos, que comenzaron este miércoles, informaron fuentes judiciales.Los voceros dijeron a Télam que los imputados, integrantes de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) , negaron el hecho y puntualmente aseguraron no haber matado a nadie, al declarar ante el fiscal de Homicidios de La Matanza Gastón Duplaa, a cargo de la causa por «homicidio agravado por haber sido cometido por un miembro de una fuerza de seguridad».
También, asesorados por el abogado Rubén Fernández, los acusados le solicitaron al fiscal que disponga una reconstrucción del hecho, añadieron los voceros.
Durante esta jornada, se iniciarán los peritajes sobre las armas secuestradas a los acusados, que estarán a cargo de especialistas de Gendarmería Nacional.
También para este miércoles se aguardan varias testimoniales de vecinos que ya declararon en sede policial y que fueron citados para ratificar sus dichos en la fiscalía, agregaron las fuentes.
Para la familia, amigos y vecinos de Esteban Bellido se trató de un claro caso de «gatillo fácil».
El pasado martes por la noche se conoció el resultado del informe preliminar de autopsia, que arrojó que Bellido recibió dos impactos de bala, uno de los cuales fue el mortal, ya que le ingresó por la espalda, en el hemitórax posterior, del lado derecho y le desgarró un pulmón, tras lo cual produjo un orificio de salida en el hemitórax anterior.
Ese proyectil no se pudo recuperar para realizar un cotejo, dijeron los voceros.
El otro impacto, en tanto, dio en una de las muñecas de la víctima.
Además de los peritajes balísticos, los investigadores ahora aguardan el resultado del barrido electrónico para determinar cuáles fueron los policías que dispararon.
Cómo fue el asesinato de Esteban Bellido
El hecho ocurrió el lunes a la tarde, en un barrio de la localidad de Virrey del Pino, cuando personal de la UTOI realizaba un operativo para desbaratar un búnker de drogas.Según las fuentes, en el lugar se encontraba el operario, a quien aparentemente los policías confundieron con un hombre que había ido a comprar estupefacientes.
En circunstancias que aún se buscan determinar, Bellido fue baleado por la Policía y murió camino a un hospital de la zona.
Los testigos desde el inicio aseguraron a la prensa y a los investigadores que la víctima no tenía arma de fuego alguna y no se enfrentó a los efectivos, que lo balearon por la espalda.
En ese marco, un grupo de manifestantes atacó un patrullero que había quedado detenido sobre la Ruta 3.
Los peritajes del crimen
Una fuente judicial explicó a Télam que, ante esta situación, se dispuso apartar a la fuerza bonaerense de la investigación y delegar la pesquisa en la Gendarmería Nacional.
Además de secuestrar las armas, los peritos se incautaron de tres móviles policiales y analizaban el sistema ABL de los mismos para reconstruir el recorrido de los mismos.
Por su parte, desde la Auditoría de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense se dispuso la desafectación de los once efectivos, añadió una fuente de la fuerza.