También se llevaron una computadora y otras pertenencias. Fue en un barrio de la zona oeste de Trelew, curiosamente, en la jurisdicción de la comisaría en donde trabaja el perjudicado.
Media hora se tomaron los delincuentes para ingresar a la vivienda, revisar sus distintas dependencias –quizás ignorando que era la casa de un policía– y sin ocasionar daños llevarse el botín. Dicen que irrumpieron por una ventana posterior a la que abrieron sin ejercer fuerza ni violencia y por eso el caso fue calificado como un “hurto agravado”.
La víctima del hecho es un cabo que trabaja en la comisaría Tercera y que se encontraba de servicio cuando le robaron. Fue en la calle Gales al 1000 y se cree que los malvivientes actuaron con guantes porque no dejaron ninguna huella en el lugar.
El caso formó parte de una verdadera ola de robos que ha venido habiendo en los últimos días en Trelew y que la policía no ha dado a conocer manteniendo los hechos en el más estricto secreto. Al igual que los asaltos callejeros que se han registrado en distintas jurisdicciones.