El Tribunal Supremo de Brasil ordenó ayer el arresto domiciliario del ex presidente Jair Bolsonaro, por violar las medidas cautelares impuestas en el marco de la investigación de su implicación en la financiación de una trama destinada a entorpecer, desde EE.UU., la causa en su contra por intento de golpe de Estado.
«Ante el reiterado incumplimiento de las medidas cautelares previamente impuestas, ordeno el arresto domiciliario de Jair Messias Bolsonaro», anunció el juez del Supremo, Alexandre de Moraes, responsable del caso. La decisión incluye un operativo de registro e incautación en la residencia de Bolsonaro.
El ex mandatario tiene prohibido recibir visitas y utilizar teléfonos móviles, incluidos los de terceros. También deberá portar una tobillera electrónica a todas horas. De Moraes tomó la medida tras constatar que el ex mandatario usó redes sociales de otras personas para difundir mensajes, en particular la cuenta de su hijo mayor, Flávio Bolsonaro, durante recientes manifestaciones de apoyo que, según la investigación, buscaban presionar y coaccionar al Supremo. Según los investigadores, Bolsonaro habría financiado, a través de su hijo Eduardo, una campaña en EE.UU. para promover sanciones y aranceles contra autoridades brasileñas, incluidos jueces del Supremo, con fondos por unos dos millones de reales. Washington revocó los visados de esos magistrados. El caso forma parte del proceso en el que se acusa al ex mandatario y a otros siete implicados de integrar el núcleo central de una trama golpista que buscaba mantenerlo en el poder tras su derrota electoral en octubre de 2022.s