Con danzas, artes marciales, música y comida tradicional, la comunidad china y vecinos de la ciudad de Buenos Aires celebraron esta tarde el Año Nuevo Chino que da bienvenida al año 4721 representado por el Conejo de Agua, en la Plaza Parques Nacionales en el barrio porteño de Palermo.El público que se acercó a avenida Figueroa Alcorta, entre Sucre y Echeverría para participar de los festejos tuvo que soportar más de 35 grados.
En este contexto, los conductores del encuentro, Pablo Coppari y Priscila Xia Chen, pidieron continuamente a los visitantes que «tomen agua, usen protector solar y vayan por la sombra».
El primer acto fue el recorrido de los Leones Chinos, considerados como un símbolo de protección contra malos espíritus (demonios), las malas energías y las malas personas, cuyos movimientos eran mirados con admiración por el público presente.
Por esta razón, se solía adornar palacios, edificios y hogares con figuras de estas criaturas -parejas formadas por un macho y una hembra-.
A los alrededores del escenario, muchos visitantes miraron con atención los más de 50 puestos instalados debajo de frondosos árboles que eran el único foco de protección ante el intenso sol que impactaba sobre el parque porteño.
Los puestos más visitados fueron aquellos que contaban historias milenarias sobre las costumbres chinas, tanto alimenticias, como de las artes marciales.
Hong Wen Wu, docente del Club Argentino de Wushu (arte marcial china), dijo a Télam: «Estamos muy contentos por participar otra vez en este evento y poder difundir nuestra cultura».
El escenario central con un gran cartel rojo con la inscripción «Año Nuevo Chino» y con imágenes de conejos que rodeaban a un niño, el Gran Dragón, símbolo de poder, nobleza y honor, de suerte y éxito, se movía de un lado a otro, lo que generó la algarabía y emoción en el público que se agrupaba en las vallas de seguridad para filmar o inmortalizar con una foto ese momento.
Gastronomía y actividades
Platos como kung pao (pollo marinado picante), jiaozi (empanadillas de masa fina rellenas de carne picada o verduras) y Chou mien (arroz salteado con verduras y salsa) fueron los platos más solicitados en la jornada.
Además de la oferta gastronómica, un cantante chino con una Copa del Mundo de plástico homenajeó al seleccionado de fútbol al grito de «Argentina Campeón».
Luego de unos 20 minutos de performance, el intérprete se retiró con una gran ovación del público.
Sofía Zhou, una ciudadana china que vive en el país hace 25 años, flameaba orgullosamente su bandera china junto con una bandera argentina.
Sobre el año del Conejo de Agua, Zhou destacó que «el conejo es un animal muy especial para nosotros porque es de buena suerte y además es dador de tranquilidad».
Acompañada de su hija, dijo: “Flameo está bandera con orgullo, porque en este país hay miles de ciudadanos de china y a pesar de la distancia nunca nos olvidamos de él».
En el puesto 49 una larga fila esperó para comprar la galleta de la fortuna que en su interior lleva una pequeña tira de papel con palabras de sabiduría o profecías relacionadas con la vida cotidiana, el amor, y la fortuna.
Aldana, de 25 años, rompió la galleta de la fortuna y contó que su papel indicaba «amor paciente» y agregó con humor que «no está tan errada la frase».
En el escenario continuaron las muestras de caligrafía, ceremonias del té y charlas de medicina tradicional china.
Otro de los puestos más visitados fueron aquellos relacionados a la medicina tradicional china, donde algunos de los que se acercaron a los festejos tomaron sesiones de acupuntura y reflexología.
«Quedas distinto. Antes me dolía la cintura y ahora casi ya no siento esa molestia», afirmó Sergio de Villa Bosch, después de una sesión de acupuntura.
La organización del BA Celebra Año nuevo Chino 2023 estuvo a cargo de la Dirección General de Colectividades dependiente de la Subsecretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural del Gobierno de la Ciudad en conjunto con Phoenix Dorada International Media Company y la Colectividad China en Argentina, que contarán con el auspicio de la Embajada de la República Popular China en Argentina y el apoyo de la Federación Argentina de Colectividades.