La localidad de Itatí vive a pleno las horas previas a la fiesta patronal de la Virgen, que como cada año se celebra el 9 de julio. Durante la jornada se realizará
el lanzamiento oficial de los festejos patronales, que convocan a miles de peregrinos que llegan desde distintos puntos de la provincia y el país. En este contexto, desde ayer el pueblo comenzó a sentir con más fuerza el calor de los fieles que ya empezaron a llegar a Itatí para recibir el día litúrgico de la Virgen Morena. A pesar de la crisis socioeconómica que atraviesa el país, los devotos se acercan al pueblo religioso a renovar la fe en María.
El rector de la Basílica de Nuestra Señora de Itatí, padre Porfirio Ramírez, hizo un parate en sus actividades religiosas ayer domingo y en diálogo con NORTE de Corrientes se refirió a cómo vive la comunidad religiosa estas celebraciones que movilizan la fe de los peregrinos y los devotos de la Virgen. Asimismo, invitó a todos a visitar la Basílica en estas festividades del 9 y 16 de julio pero también hizo un fuerte llamado de atención a la dirigencia política, para que «todos trabajemos en conjunto para salir adelante con nuestra nación, con nuestra provincia, porque si estamos divididos no podemos salir adelante como sociedad», manifestó en diálogo con este diario.
En este sentido, el rector de la Basílica de Itatí reflexionó: «Siempre rezamos por nuestra patria y ojalá que la situación económica que nos afecta a todos se vaya mejorando por el bien de todos. Pero considero que para que la situación mejore hay que estar más unidos, porque a veces se siente la división social, en las opiniones de los gobernantes, todo se mezcla, y salen a la luz situaciones no gratas para la sociedad», reclamó. En esta línea, en nombre de la virgen de Itatí, el padre Ramírez hizo un llamado a que en la clase política «todos trabajemos en conjunto para salir adelante con nuestra nación, con nuestra provincia, porque si estamos divididos no podemos salir adelante como sociedad», aseveró.
TURISMO RELIGIOSO
Al ser consultado sobre cómo afecta la crisis económica al turismo religioso en la localidad, el padre Ramírez detalló: «Se siente la crisis en la localidad, porque desde hace dos meses notamos que disminuyó la llegada de los peregrinos. Hoy -por ayer domingo- recién se ve mucha gente en la calle, entre semana hay poco movimiento, todo influye con la situación económica. Igual la gente no deja de venir. Por ejemplo, antes venía gente de otros lugares como Rosario, y se quedaban varios días, ahora solo vienen por un día y hacen pocas compras. Así como los chaqueños, muchos nos cuentan que se unen entre familias para poder pagar el combustible y venir a cumplir sus promesas. Antes venía desde Chaco una sola familia en vehículo fácilmente y se quedaba varios días. Se siente el vacío en el pueblo. Ahora estamos con muchas expectativas de que, como todos los años para esta fecha, se colme de peregrinos y fieles», precisó el rector de la Basílica.