Intervención asistida de perros con pacientes pediátricos oncológicos. / Imagen del Hospital Universitario 12 de Octubre
Todos los jueves la planta de hospitalización de Oncología Pediátrica se llena durante 3 horas de perros que acompañan a los niños y niñas que padecen tumores cerebrales.
Esta iniciativa del Hospital 12 de Octubre presta apoyo de forma ambulatoria a los niños de la consulta de Neuropsicología del Servicio de Pediatría que padecen tumores cerebrales.
Dado que el tratamiento está teniendo muy buenos resultados han decidido prolongarlo dos años más de aquí en adelante.
El tesoro de Blanca
El nombre de la iniciativa hace homenaje a una paciente oncológica que se recuperó gracias al perro de su familia y les dio la idea de trasladar esa terapia al resto de niños del hospital que sufren de tumores cerebrales.
Este es el segundo proyecto de intervención asistida con perros desarrollado por el Hospital 12 de Octubre junto a los especialistas en terapia asistida con animales Yaracán.
Con este proyecto presentan un doble objetivo:
- Generar un vínculo de confianza entre niño y perro, el cual ayuda a que los pacientes y sus familias desvíen su atención de la enfermedad.
- Un cambio de rol que permite a los niños que sufren de tumores cerebrales pasar a ser cuidadores y guías de los perros.
Para este programa pionero, el equipo de Yaracán dispone de hasta ocho perros de intervención, coordinados por una psicóloga de la misma asociación y de la consulta de Neuropsicología del 12 de Octubre.
“Nosotros nos quitábamos muchas veces la bata e incluso nos poníamos ropa de calle para hacerlo más cercano, pero no lo conseguíamos. Sin embargo, lo que se vio es que sí se consigue con los perros. Lo cierto es que el perro transmite una sensación de bienestar que hace que el niño se olvide de que está ingresado en ese momento y de que tiene una enfermedad”, explica la doctora Berta Zamora, médico de la consulta de neuropsicología de pediatría del Hospital 12 de Octubre.
“Es importante -añade- que el niño piense en disfrutar con el perro porque nos ayuda a los demás que trabajamos con los niños a que podamos intervenir y adelantar ese proceso de recuperación cerebral”,
Los pacientes en cuestión: niños con tumores cerebrales
Los impulsores de esta iniciativa explican que las secuelas cognitivas en niños con tumores cerebrales son bastante frecuentes, no solo como consecuencia de la enfermedad, sino por los tratamientos que reciben.
El diagnóstico en sí supone un impacto muy grande en la vida del paciente, en su comportamiento, rendimiento escolar y en la relación con sus familiares y amigos.
Por ello, la intervención asistida con perros supone una gran aportación y ayuda, ya que a través del estímulo y la motivación que provocan los animales se favorecen cambios en el área emocional, cognitiva, psicomotriz, social y comunicadora.
“Un niño con daño cerebral tiene por una parte un cerebro que es órgano diana para este tipo de lesiones pero también con gran plasticidad cerebral. Si nosotros podemos intervenir cuanto antes, incluso en ámbito hospitalario, la recuperación ya se ha visto que es mucho mejor”, asevera la doctora Berta Zamora.
Además, esa interacción genera un estado de bienestar que facilita las valoraciones cognitivas y la puesta en marcha de estrategias de rehabilitación. También favorece el trabajo multidisciplinar entre los diferentes especialistas.
Una propuesta pionera que comenzó en 2019
La terapia con perros se ha realizado en el 12 de Octubre en tres proyectos diferentes hasta la fecha.
En 2019 se llevó a cabo la primera iniciativa con los pacientes pediátricos en cuidados intensivos del Hospital 12 de Octubre. Este proyecto llamado Huellas de colores fue realizado en colaboración con la Cátedra de Animales y Sociedad de la Universidad Rey Juan Carlos.
Dicho programa, que comenzó como un proyecto de investigación, demostró que las intervenciones asistidas con animales reducen significativamente el dolor, el miedo y la ansiedad en niños ingresados.
El estudio, llamado Viabilidad de la aplicación de la terapia asistida con animales en una unidad de cuidados intensivos pediátricos: eficacia en la reducción del dolor, el miedo y la ansiedad demostró que los menores en situación de gravedad experimentaban una disminución del dolor de hasta tres puntos, así como una reducción del nivel de ansiedad gracias a la terapia con perros.
En 2020 se puso en marcha otro proyecto: 4 patas de apoyo, que supuso la primera colaboración de Yaracán con el Hospital 12 de Octubre. Este se centraba en estimular, motivar y activar emocionalmente a niños entre dos y 12 años de edad diagnosticados de errores congénitos del metabolismo y niños con citomegalovirus. Los resultados de este fueron tan positivos que han motivado la puesta en marcha de El tesoro de Blanca.
El tercer y actual proyecto es El tesoro de Blanca, que parece seguir la línea de los anteriores en cuanto a la efectividad que muestran las terapias caninas en pacientes pediátricos.