El Senasa, que tiene la responsabilidad de controlar que las personas no ingresen a la región patagónica con productos prohibidos o restringidos como frutas, hortalizas, carnes rojas, salazones con hueso, productos caseros o artesanales sin identificar, con el objetivo de resguardar y mantener el estatus fitosanitario de la zona.
Con ese objetivo es que se fiscaliza en los distintos puntos de acceso a la región como rutas y aeropuertos.
«Quienes estén por viajar hacia la Patagonia en estas vacaciones de invierno deben informarse antes de viajar para evitar inconvenientes y demoras», aclaró, e informó que las personas interesadas pueden acercarse a las oficinas del Senasa o llamar a la línea gratuita 0800-999-2386, de lunes a viernes de 9 a 17.
Los productos de origen vegetal que no pueden ingresar a la Patagonia son los hospederos de la mosca de los frutos: acerola, arándano, babaco, carambola, cereza, chirimoya, ciruelo, cítricos (cidra, calamondín, lima dulce, lima, mandarina, mineola, naranja, naranja agria y pomelo), damasco, durazno, falso guayabo, frambuesa, granada, guanabana, guayaba, higo, kaki, kiwi, kumkuat, litchi, locoto, lucuma, mango, manzana, maracuya, membrillo, nectarina, níspero, olivo maduro, palta (excepto la variedad Hass), papaya, pasionaria, pepino dulce, pera, pera asiática, pimiento, pitaya o fruta dragón, tomate de árbol, tuna, uchuva y uva.
Por otra parte, tampoco pueden ingresar carnes y derivados de especies susceptibles a la fiebre aftosa (los más comunes son bovinos, porcinos, ovinos, caprinos y algunas especies de animales silvestres como ciervos y nutrias).
Ni tampoco, carnes frescas con hueso, menudencias, productos de origen artesanal o casero. Carne producto de cotos de caza. Cueros frescos.
También se aclaró que el ingreso a la Patagonia de «material de propagación» también está regulado, por lo que se recomienda consultar antes de viajar con plantas o partes de plantas que puedan requerir de documentación sanitaria para su traslado.
Finalmente se informó lo que sí se puede llevar, en cantidades para el consumo personal o familiar; alimentos secos que no requieran condiciones especiales de almacenamiento (arroz, fideos, yerba, azúcar y demás productos de almacén), alimentos cocidos listos para el consumo, frutas y hortalizas que no sean hospederas de la mosca de los frutos; cortes de carne sin hueso y/o embutidos frescos envasados al vacío y rotulados, como así también embutidos secos y salazones sin hueso, con el rótulo correspondiente de origen.
El coordinador de la Barrera Zoofitosanitaria Patagónica del Senasa, Oscar Astibia, explicó que «además de encontrarse libre de plagas y enfermedades como lo son la polilla de la vid (Lobesia botrana) y la anemia infecciosa equina, la región Patagónica es reconocida internacionalmente como libre de mosca de los frutos y fiebre aftosa sin vacunación».
«Esto favorece el acceso de sus productos a los mercados internacionales más exigentes», remarcó.
En ese sentido Astibia dijo que «para mantener esa condición es fundamental el compromiso de toda la ciudadanía, a la que le solicitamos su colaboración en los controles que llevamos a cabo en los puntos de ingreso a la Patagonia».