El pontífice Prevost recorrió en un carrito de golf el complejo de las antiguas Villas Pontificas, informó la agencia EFE, formadas por terrenos agrícolas, jardines, grandes e invernaderos.
En el gran invernadero, construido a a semejanza de los brazos de las columnas de la plaza de San Pedro, habló ante decenas de invitados. León XIV dijo que “el Borgo Laudato si representa una verdadera vocación para todo ser humano, un compromiso que debe realizarse dentro de la propia creación, sin olvidar nunca que somos criaturas entre las criaturas y no creadores”.
Recordó que el lugar “es una semilla de esperanza que el Papa Francisco nos ha dejado como legado, una semilla que puede dar fruto de Justicia y paz”, ya que el pontífice argentino “quiso este proyecto inspirado en su encíclica ‘Laudato si’ sobre la defensa de la Creación”.
“Lo que vemos hoy es una síntesis de extraordinaria belleza, donde la espiritualidad, la naturaleza, la historia, el arte, el trabajo y la tecnología conviven armonía”, describió.
Los turistas podrán visitar el Jardín de la Virgencita, la avenida de las Rosas y la avenida de las Encinas, la terraza principal, y llegar al parque Antiguo, donde se conservan los restos arqueológicos de la época del Palacio Domicianno, incluido un teatro.
También se podrá pasear por el Jardín de los Espejos, que toma su nombre de los estanques de agua rectangulares donde florecen los nenúfares, y la granja vaticana, las áreas agrícolas y el antiguo olivar con más de mil árboles, y la viña biodinámica.
El proyecto estará completado a comienzos de 2026. El Vaticano informó que se completó sin afectar las arcas del Vaticano, gracias a donaciones privados.
Habrá cursos de jardinería y restauración, que podrán seguir migrantes y refugiados, mujeres rescatadas de la trata y personas con discapacidad, que serán preparadas para el empleo.