Las tensiones en Medio Oriente crecieron en las últimas horas a niveles que acercan el conflicto al abismo, con la amenaza de Irán de atacar a Israel en su propio territorio luego de la agresión sufrida por su consulado en la capital de Siria, Damasco, el 1 de este mes, en el que murieron 12 personas, entre ellos un alto líder de la Guardia Revolucionaria Islámica, atribuida a Tel Aviv.
Si bien los cruces y desafíos por ahora verbales entre iraníes e israelíes comenzaron a mitad de la semana, la sensación de que el conflicto puede escalar fue atizada ahora por la Casa Blanca, que admitió que tales amenazas son “reales” y “creíbles” luego de que el diario The Wall Street Journal diera esa posibilidad como inminente citando a un funcionario e informes de inteligencia de Estados Unidos.
La fuente con conocimiento del asunto, que habló en condición de anonimato, señaló al WSJ que los reportes de las agencias de investigación del Gobierno de EEUU vaticinan un ataque de represalia iraní en las próximas 24 a 48 horas, “posiblemente en suelo israelí”.
Según el informe, que cita a un asesor de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC), miembros de esa rama de las Fuerzas Armadas iraníes entregaron a principios de esta semana al líder supremo persa, el ayatollah Ali Jamenei, varias opciones para atacar objetivos israelíes, pero el imán aún no tiene decididos los pasos a seguir.
El reporte del medio norteamericano fue más allá, y afirmó que Israel se prepara para un posible asalto contra el sur o el norte de su país, recogió el portal internacional France 24.
“Si Irán ataca desde su territorio, Israel responderá y atacará en Irán”, dijo a su vez el ministro de Exteriores del Estado judío, Israel Katz, en una publicación en X escrita en farsi y en hebreo.
Un ataque en Siria
El ataque del 1 de abril contra el consulado iraní en Damasco mató al general Mohammad Reza Zahedi, una figura prominente de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán que dirigió la Fuerza Quds de élite del grupo en el Líbano y Siria hasta 2016.
Los otros 11 muertos incluyeron a seis miembros de la Guardia Revolucionaria, cuatro sirios y un miembro de la milicia de Hezbollah, recogió en su portal público la agencia de noticias AP.
Israel ha atacado decenas de objetivos vinculados a Irán en Siria a lo largo de los años con la intención de interrumpir las transferencias de armas y otras cooperaciones con Hezbollah del Líbano, que cuenta con el respaldo de Irán.
El Ejército israelí rara vez comenta sobre estos ataques, pero desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamas en Gaza ha habido intercambios de disparos casi diarios entre las fuerzas israelíes y Hezbollah a lo largo de la frontera entre Israel y el Líbano.
Al mismo tiempo, Israel dedicó las últimas horas a bombardear impiadosamente edificios y casas residenciales de la castigada Gaza, donde desde el inicio de la guerra el 7 de octubre pasado –impulsada por una inédita y no menos salvaje ofensiva de los islamistas palestinos en Israel- las fuerzas enviadas por el gobierno de Benjamín Netanyahu mataron 33.634 personas.
La preocupación del Papa
El papa Francisco afirmó este viernes sentirse “angustiado” por el conflicto y pidió “que cese inmediatamente el fuego en la Franja de Gaza“, “que sean liberados los rehenes” y más ayuda para los civiles.
La comunidad internacional exige desde hace meses la apertura de nuevas rutas directas para suministrar ayuda al norte de la Franja de Gaza, donde la crisis humanitaria es más grave.
¿En qué puede terminar la guerra si Irán entra en ella? La pregunta taladra las cabezas de los líderes mundiales, pero por ahora no tiene respuesta.
O tal vez sí, pero ninguno de esos protagonistas de estos tiempos que pronto serán historia se anima a confesarla.