Mateen «era un combatiente del Estado Islámico», afirmó la agencia yihadista sobre la masacre perpetrada por Omar Mateen a un club nocturno homosexual en la ciudad estadounidense de Orlando, Florida.
El asesino de la masacre de Orlando, Omar Mateen, pertenece al grupo terrorista Estado Islámico, según informó la agencia de noticias del califato, Amaq. Además, el FBI confirmó que el terrorista llamó al 911 previo a la matanza y juró lealtad al califato yihadista.
Mateen «era un combatiente del Estado Islámico», afirmó la agencia yihadista sobre la masacre perpetrada por Omar Mateen a un club nocturno homosexual en la ciudad estadounidense de Orlando, Florida.
Así lo informó Site, el portal que monitorea las actividades de los fundamentalistas en Internet, según el cual los yihadista reivindicaron el atentado a través de Amaq, la agencia de prensa del Califato.
En el texto de reivindicación reportado por la directora de Site, Rita Katz, en un tuit se lee que una fuente dijo a la agencia Amaq: «el ataque que hizo blanco al club nocturno homosexual de Orlando, en Florida, y que provocó 100 entre muertos y heridos, fue perpetrado por un combatiente del Estado Islámico».
Es la peor masacre con un tirador en Estados Unidos
El atentado, que empezó a eso de las 2 de la madrugada hora local, es el peor tiroteo masivo en la historia de Estados Unidos.
Mateen, un ciudadano estadounidense de 29 años y de padres afganos, portaba un fusil de asalto y una pistola cuando se atrincheró con rehenes en la discoteca Pulse, frecuentada por homosexuales, donde abrió fuego indiscriminadamente hasta que fue abatido por la policía.
Asimismo, el FBI confirmó que Mateen llamó al 911 de la policía antes del tiroteo y que declaró lealtad a la milicia terrorista Estado Islámico.
Un investigador del FBI dijo que el atacante era un ciudadano estadounidense que había tenido contacto en dos oportunidades con la autoridad, en 2013 y 2014, pero que actualmente no estaba bajo observación.
Además aseguró que las armas que utilizó en el tiroteo ocurrido en la madrugada, en el que murieron al menos 50 personas, fueron adquiridas legalmente.
Previamente los medios habían informado de la llamada al 911 y habían asegurado que el atacante estaba en la mira del FBI.