Desde hace años diferentes grupos de jóvenes católicos con compromiso social, cocinan en cuatro parroquias
capitalinas y desde allí salen a recorrer las calles correntinas en busca de familias, adultos, jóvenes y niños que se encuentran particularmente en condición de calle, o bien que cartonean en la vía pública, para asistirlos, tal vez, en lo que será su único alimento del día.
Lo hacen desde hace años y lo mantienen en pleno verano, con lluvia, en feriado y fiestas y sobre todo cuando las bajas temperaturas se hacen sentir en Corrientes.
En general estas raciones de comida que se sirven a diario se elaboran con las donaciones que otros correntinos acercan a esas parroquias, o por ayuda oficial y gestiones de los propios grupos.
Por estos días, los horarios en que salen los grupos son cuando empieza a oscurecer y desciende la temperatura. Según el cronograma, los lunes y martes a las 18.30, el grupo Buen Samaritano que pertenece a la parroquia Jesús Nazareno (Carlos Pellegrini 1558) sale a repartir raciones de merienda o cena.
Todos los miércoles a las 18 es el turno de los samaritanos de iglesia Catedral Nuestra Señora del Rosario (San Lorenzo 1035). Los jueves, en el mismo horario, los jóvenes solidarios salen a repartir alimentos calientes desde la iglesia San Juan Bautista, en el barrio Bañado Norte (Gobernador Gelabert 300). Y los viernes, a partir de las 18.30, es el turno de la agrupación juvenil del Buen Samaritano de la parroquia San Francisco Solano (Plácido Martínez 1146).
Desde estos grupos apelan a la solidaridad de los correntinos para continuar con su tarea de llevar ayuda alimentaria a cientos de personas que lo necesitan. Quienes deseen colaborar, solo tienen que acercar alimentos a esas parroquias.