«Estas acusaciones de inacción ante una lacra que combatimos con todas nuestras fuerzas son inaceptables y ofenden a toda Francia», escribió el presidente francés. Afirmó que esta lucha contra el antisemitismo «no puede ser instrumentalizada».
El jefe de Estado francés enfatizó en su respuesta que «sigue siendo y seguirá siendo el garante de la urgente necesidad de combatir esta abominación, en todas partes y siempre». «El antisemitismo en nuestro país tiene una larga historia. Ha sido alimentado durante mucho tiempo por la extrema derecha y ahora también lo es por la extrema izquierda, que esencializa a la comunidad judía y fomenta el odio contra ella», enfatizó el jefe de Estado.
Según Emmanuel Macron, «el Estado palestino debe representar el fin de Hamas». «Esta es la única manera hoy de erradicar verdaderamente a Hamás y evitar que la juventud israelí sea consumida por una guerra permanente, devastadora para los palestinos de Gaza, pero también para Israel y toda la región», añadió.
Emmanuel Macron considera que su iniciativa diplomática para el reconocimiento del Estado de Palestina es una «mano tendida» a Israel para una «paz duradera» en la región. Rechaza cualquier acusación de apoyar, mediante este proceso, al movimiento islamista palestino Hamás.
El presidente francés también abordó la situación en la Franja de Gaza y se dirigió a Israel. «Les pido solemnemente que abandonen la mortífera e ilegal carrera precipitada hacia una guerra permanente en Gaza, que expone a su país a la indignidad y a su pueblo a un callejón sin salida; que cesen la ilegal e injustificable recolonización de Cisjordania; y que acepten la mano tendida de los socios internacionales dispuestos a trabajar por un futuro de paz, seguridad y prosperidad para Israel y la región», escribió Macron a Benjamín Netanyahu en Le Monde.
El primer ministro israelí ha provocado una nueva crisis con Francia al acusar a Emmanuel Macron de «alimentar el fuego antisemita» con su intención de reconocer al Estado palestino.
En una carta dirigida al presidente francés el 17 de agosto, expresó su «preocupación por el alarmante aumento del antisemitismo en Francia y la falta de acción decisiva del gobierno para abordarlo». El 19 de agosto, la presidencia francesa ya había denunciado la acusación de Benjamín Netanyahu como «errónea y abyecta», afirmando que Emmanuel Macron se había enterado a través de la prensa y respondería por carta.
A él se sumó con similares acusaciones el nuevo embajador norteamericano en París, Charles Kushner, padre del marido de Ivanka Trump, la hija del presidente norteamericano, en otra carta, por la que fue convocado a la cancillería francesa y no asistió.