La diligencia, según la denunciante, fue supervisada por un comisario alcoholizado. El insólito y grave caso ocurrió el fin de semana en la zona rural de Telsen. La damnificada informó que hará la denuncia en la fiscalía de Puerto Madryn.
Trelew (Agencia) Una mujer que tiene campo en la zona de Telsen denunció que le robaron “10 millones de pesos” que tenía guardados en “un cajón dentro de una media”, durante un allanamiento que le hicieron el fin de semana buscando unas armas que ella había publicado para la venta en sus redes sociales.
Al procedimiento se lo hicieron cuando no estaba, por lo que cuando volvió a su casa encontró la puerta de acceso reventada y un impresionante desorden en todas las dependencias del lugar. Lo curioso es que la diligencia, autorizada por un juez de Puerto Madryn, fue supervisada por un comisario que tenía mucho olor a alcohol y que venía de una fiesta.
La dueña del lugar es la misma que denunció hace unos días a “un conocido estafador”, que le robó unos 4 millones de pesos, haciéndole creer que le iba a comprar unos animales en una transacción que nunca se concretó.
Ese caso todavía no tiene ninguna resolución, aseguró la damnificada, pese a que ya ha pasado más de una semana, que el delincuente se sigue moviendo por la zona y que ella le proporcionó a la Brigada de Investigaciones de Trelew hasta un video que logró filmar con su celular, en el que el estafador está contando la plata.
Ahora, le tocó ser presunta víctima de un allanamiento ilegal en su campo: de una diligencia en la que –según ella– la policía no encontró nada de lo que buscaban. “Pero les llevaron los celulares a los peones, dejándolos incomunicados, y también el mío. Se llevaron también un (arma calibre) 22 de mi marido, del que mañana vamos a llevar los papeles y además secuestraron un (revolver) viejito que era del papa de mi marido. A ese, seguramente, no lo vamos a recuperar más”, contó la denunciante. Y luego se quejó: “La jueza no les puede dar una orden de allanamiento por una prueba que el comisario dice que lo sacó de un WhatsApp!”.
En la orden de allanamiento la jueza actuante pide el secuestro de dos fusiles “Máuser” con mira telescópica que la policía finalmente no encontró, llevándose, en cambio, incautadas dos armas de fuego que encontraron en el lugar allanado y que, según la propietaria, tendrían los papeles con los que reclamarían la restitución. Aunque, para la mujer lo más importante es el robo de los 10 millones de pesos que le faltaron a partir de la actuación policial.
Según le anticipó a Crónica, va a ir a la fiscalía de Puerto Madryn a denunciar este grave hecho y la realización de un allanamiento, a todas luces, totalmente ilícito. Ilegal, de acuerdo a sus dichos.