El juez Miguel Ángel Faría, del Juzgado de Instrucción 4 de Apóstoles, habría ordenado la prisión preventiva de Sebastián Kiczka, quien está acusado de tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil al igual que su hermano y ex diputado Germán Kiczka.
Según sostienen medios misioneros, la decisión fue tomada después de la fallida ampliación de indagatoria en la que Sebastián decidió abstenerse, luego de que su abogado defensor no se presentara a la audiencia.
En el texto firmado por el titular del mencionado estamento de la ciudad misionera, se explicita que al mayor de los hermanos Kiczka «se le imputa la presunta responsabilidad de tener, facilitar y distribuir a personas no individualizadas alrededor de 319 archivos multimedia con contenido de explotación sexual infantil».
Además, se remarca que «en el material secuestrado se observa a niños y niñas de muy corta edad; algunos de los cuales a simple vista se advierte que no alcanzan los 13 años de edad, siendo abusados sexualmente mediante diferentes prácticas».
Por otro lado, en el expediente también se indaga en la serie de chats que fueron detectados en el primer allanamiento al domicilio del padre de los imputados, en febrero pasado, en los que Sebastián afirma haberse bajado «una aplicación para ver nenitas», habla de su adicción a las menores y de relaciones sexuales que presuntamente mantuvo con varias y hasta invita a tener un encuentro de las mismas características a una adolescente de 14 años.
En aquellos chats el imputado explicó: «Yo me bajé una app para ver nenitas de 12 años, pero también quiero a la de 14, no sé cómo siempre zafo, mirá que me estuve con menores». Asimismo, añadió: ‘Ay Dios, me tengo que sacar esa adicción a las menores, pero es que me gustan».
Por último, se determinó que buscaba zoofilia en páginas pornográficas y que muchos registros de abusos sexuales de menores habían sido eliminados. La carátula de la causa es «Publicaciones, reproducciones y/o distribuciones de representaciones de un menor dedicado a las actividades sexuales explícitas».
Todo esto luego de que se supiera que una empleada del Juzgado de Paz de Apóstoles mantuvo conversaciones telefónicas con el ex diputado misionero e imputado por tenencia y distribución de material de abuso sexual infantil.s