Ocurrió un incidente con denuncias cruzadas, luego de un accidente entre motocicletas, en la comisaría 19 del barrio Colombia Granaderos.
Por un lado la familia de un joven que había chocado con la moto se acercó a la sede policial para realizar la denuncia, pero terminó en un enfrentamiento con los agentes, a quienes denunció que «le pegaron un sopapo a su hija discapacitada», quien intento filmar el momento en que se producía el altercado entre las partes, lo que podía ser utilizado como una prueba.
Marisa Villasanti contó: «Los policías nos trataron como perros, mi hija quiso grabar y un policía le pegó un puñetazo y le tiró el celular. Mi hija es discapacitada».
En ese orden, añadió: «Luego vine con mi hija más chica y le hicieron los mismo. El jefe me dijo: Esta es mi casa y acá mando yo. Y nos echaron como perros».
Por su parte los uniformados de esa seccional no quisieron brindar declaraciones a la prensa, hasta que Sergio Aguilar, comisario mayor a cargo de Relaciones Institucionales de la Policía de Corrientes, hizo declaraciones a la radio Sudamericana, donde afirmó que se investigan los hechos y que los involucrados pueden denunciar en Asuntos Internos si no están conformes con el accionar, y que se realizaría una investigación interna de manera paralela a la que lleva adelante la Justicia.
De esta manera, la damnificada informó al mencionado medio que realizó la denuncia de la agresión en la fiscalía en turno.
Según el comisario, la policía actuó luego de ocurrir un siniestro vial ayer por la mañana, a las 8.30, entre una motocicleta y una camioneta en la intersección de las calles Lavalle y Gobernador Contte del barrio Santa Rosa, donde un joven de 24 años resultó lesionado y fue trasladado al hospital Escuela, y tras recibir las curaciones quedó internado.
Sobre el lugar del siniestro los vecinos manifestaron que es una de las esquinas donde ocurren accidentes en reiteradas ocasiones, por lo que piden que se coloque un lomo de burro para que los conductores aminoren la marcha.
Al principio se trataba de un accidente más, como ocurren todos los días en la capital, nada presagiaba semejante escándalo suscitado de manera innecesaria por parte de la fuerza.
Aguilar señaló que la intervención de la policía fue solicitada por el fiscal de turno, que inicio una causa caratulada «lesiones en accidente de tránsito», y en principio de oficio.
«Cuando existe un hecho o una causa judicial, ya la policía actúa en ese sentido, más aún cuando hay una persona lesionada», afirmó.
Asimismo, comentó que un «familiar del joven accidentado», presuntamente empleado de Tránsito municipal, solicitó la intervención de esa dependencia. Se trata de la madre del lesionado, quien quería realizar la denuncia, lo cual no fue procedente, ya que el caso estaba bajo jurisdicción de la Justicia, que ya había tomado intervención ordenando el secuestro de los dos rodados, para realizarles los peritajes accidentológicos, y se esperaba a tomarle declaración al conductor de la camioneta.
Esta situación generó una discusión con los oficiales presentes en la comisaría y los allegados al accidentado, que luego escaló con forcejeos, relató uno de los involucrados.
Aguilar mencionó que durante ese altercado «a una joven se le había caído el teléfono» negando de esta manera la agresión que la denunciante realizó en la fiscalía y a los medios periodísticos.