El Gobierno de Perú dejó sin efecto el toque de queda impuesto días atrás en algunas provincias de las regiones de Ayacucho y La Libertad en respuesta a las protestas desatadas tras la destitución del presidente Pedro Castillo que dejaron al menos 30 personas muertas.A partir del martes, la provincia de Virú, del departamento de La Libertad, y las jurisdicciones de Cangallo y Huamanga, de la región de Ayacucho, ya no contarán con la medida de inmovilización social obligatoria, anunciaron las autoridades mediante un decreto publicado en el Diario Oficial El Peruano.
Si bien aún no hay vuelos hacia Ayacucho y el transporte terrestre no es fluido, Virú, Cangallo y Huamanga no reportaron bloqueos de rutas ni actos vandálicos o de violencia, de acuerdo con el texto, informó el diario local La República.
El domingo pasado, el Gobierno de Dina Boluarte decretó toque de queda por cinco días en ocho regiones.
La decisión se amparó a su vez en el Decreto Supremo por el que se declaró el estado de emergencia nacional por 30 días, durante el cual la Policía Nacional mantiene el control del orden interno con el apoyo de las Fuerzas Armadas.
Tras el decreto, permanece el toque de queda en las ciudades de Pisco e Ica, en la región de Ica; Chincheros y Andahuaylas, en Apurímac; Espinar, Chumbivilcas, La Convención y Cusco, en Cusco; Carabaya y San Román, en Puno; y Tayacaja y Angaraes, en Huancavelica.
Ola de protrestas
Perú vive una ola de protestas desde el 7 de este mes, cuando el Congreso destituyó a Castillo después de que este anunciara la disolución del Parlamento y el establecimiento de un gobierno de excepción con suspensión de garantías constitucionales.Sucedido por la hasta entonces vicepresidenta Dina Boluarte, Castillo fue arrestado inmediatamente y la Justicia le impuso 18 meses de prisión preventiva por rebelión y conspiración, por entender que intentó dar un golpe de Estado.
Desde aquel día, buena parte del país es escenario de protestas en las que los manifestantes reclaman el adelantamiento de las elecciones generales previstas para 2026, y en las que murieron al menos 33 personas y resultaron heridas 569, según datos oficiales.