Lo advierte la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF) y hace un llamamiento a la prevención y al ejercicio responsable durante las vacaciones de verano.
“El perfil más habitual es el del deportista ocasional”, explican especialistas desde SERMEF.
“Personas que, tras meses de vida sedentaria o con poca actividad física, aprovechan el verano para ‘ponerse en forma’ de manera repentina, sin calentar, sin estirar y sin preparación, lo que dispara el riesgo de lesiones”, explica.
Lesiones frecuentes por actividad física esporádica
- Marchas por el monte o senderismo prolongado podrían causar sobrecargas musculares, tendinitis o esguinces en personas que no están acostumbradas a caminar largas distancias.
- Ejercicios en la playa, como las palas, elevan la probabilidad de sufrir lesiones en el hombro, codo o el tobillo, por los movimientos repetitivos sin entrenamiento previo,.
- El calzado inadecuado, por ejemplo chancletas, sandalias sin sujeción o calzado plano, puede causar lesiones en los pies como fascitis plantar, metatarsalgia o tendinitis.
Recomendaciones para realizar ejercicio físico en verano de forma segura
Los médicos rehabilitadores de SERMEF insisten en realizar actividades físicas con la preparación adecuada. Aconsejan:
- Calentar antes de iniciar cualquier ejercicio.
- Estirar al acabar la actividad
- Usar ropa y calzado adecuados
- Hidratarse
- Consultar con un profesional si se va a comenzar un nuevo deporte o rutina de ejercicio.
10 consejos para practicar ciclismo y evitar lesiones
También esta época es propicia para practicar ciclismo, un deporte que es recomendable para casi todas las personas, a excepción de quienes padecen determinadas patologías, ya que mejora el tono muscular, retrasa la aparición de artrosis, disminuye la presión arterial y aumenta la capacidad pulmonar, entre otras cosas.
Sin embargo, el ciclismo requiere de algunas precauciones para evitar lesiones. El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) ofrece unas recomendaciones básicas:
- Primero se debe escoger la talla adecuada de la bicicleta.
- También hay que elegir entre la variedad del tipo de bicicleta (mountain bike, de paseo…), según el uso que le vayamos a dar.
- Tras comprarla, se debe regular el sillín de forma que la pierna quede casi estirada al estar en la posición más baja del pedal.
- Es importante también ajustar la altura del manillar. Los deportistas que sufren de dolor de espalda pueden elevar más el manillar para no tenerla tan flexionada, explican los expertos.
- Una posición incorrecta de la cala puede provocar dolor en la columna vertebral y sobrecarga en la musculatura y tendones.
- Cuidado con los calapiés: pueden provocar caídas al detener la bicicleta.
- Aparte de adaptar la bicicleta, es recomendable hacer ejercicio fuera de ella para fortalecer los músculos de las piernas y el core.
- Usar siempre casco.
- Extremar la hidratación, sobre todo en verano.