El taekwondista Sebastián Crismanich, medalla de oro en Londres 2012, analiza la posibilidad de retirarse de la actividad tras perder todo chance por poder revalidar su título, en la categoría hasta 80 kilos, en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
“Son momentos en los que estamos realizando balances y estudios con mi equipo para definir si es el final de mi carrera o si voy a seguir. A mi me gusta mucho la gestión deportiva, trabajar en la comisión de atletas. Ahí puede estar mi futuro, ya como figura puedo conseguir esponsors para los chicos que recién empiezan”, adelantó el campeón olímpico en diálogo exclusivo con Télam.
Luego Crismanich amplió: “Las últimas evaluaciones que venimos haciendo no son muy alentadoras, el proceso fue realmente muy duro, con muchas lesiones secundarias. No hemos logrado estar ni al 90 por ciento, pese a que a nivel pulmonar y de entrenamiento el motor de mi cuerpo está mejor que en Londres. Hoy las articulaciones están bastante desvastadas y si o si necesito operarme”.
“He recibido la última noticia de que ya no hay más chances de incorporarnos a los Juegos Olímpicos y ahora tengo que hacerme una serie de estudios en ambas piernas, en la rodilla sobre todo y en la zona de pubis donde probablemente tenga que someterme a un par de cirujías más para quedar un poco más entero y con la rehabilitación tener la posibilidad de pelear de igual a igual a cada rival. Pero en esta última lesión he quedado tan descompensado del cuerpo que es muy difícil que vuelva a pelear de igual a igual y entonces también estamos analizando con el equipo tomar la decisión del retiro, al menos del alto rendimiento”, describió.
Sobre la sensación de quedar afuera de los Juegos, el taekwondista también explicó: “Es una desilusión por no poder revalidar mi título después de un duro proceso de rehabilitación de una lesión que era impensada volver en tan poco tiempo. Tengo conciencia que soy un campeón olímpico y no voy a dejar de serlo porque vengan otras ediciones de los juegos que den otros campeones. Esa medalla va a quedar siempre para mí, mi país, mi equipo y la gente que siempre me apoyó”.