Asimismo, los magistrados, indicaron que resolución de juez de la causa estaba debidamente fundada y razonada, según la información suministrada por el licenciado Jorge Suárez, vocero de prensa del MPF con asiento en Sarmiento.
La audiencia de revisión de la medida de coerción, se desarrolló esta tarde en la sala de audiencias de la oficina judicial de Sarmiento.
Al inicio del acto judicial, el defensor público, indicó que la resolución adoptada por el juez de la causa, tuvo una valoración errónea respecto del riesgo procesal de peligro de fuga. A ello agregó, que el Ministerio Público Fiscal, no fundamentó los peligros concretos vinculados a la propuesta de que su asistido transite el proceso judicial con una medida menos grave que la prisión preventiva.
En consecuencia, propuso que se revoque la decisión del magistrado local y que Llaipén permanezca en el domicilio de unos familiares de la localidad de Sarmiento, bajo la modalidad de arresto domiciliario.
Por su parte, la fiscal Vázquez, consideró que la resolución del juez Quiroga estaba debidamente fundada. En ese orden, solicitó que se mantenga la decisión de aplicación de la prisión preventiva por el plazo de seis meses a cumplir en la comisaría de Sarmiento.
El caso
El hecho que investiga la fiscalía, ocurrió el domingo 16 de marzo de 2025, a 50 kilómetros aproximadamente, de la localidad Dr. Ricardo Rojas.
A dos kilómetros de ese lugar, se encuentra el casco de la estancia “La Fuencisla”, donde vive Carlos Omar Llaipén. Según la investigación fiscal, el último domingo, a las 20:00, Pedro Segundo Quilodrán, circulaba en una motocicleta tipo cross, por el mencionando campo. Había sido contratado por un ganadero para la tarea de búsqueda y arreo de yeguas y caballos salvajes. Se encontraba solo, totalmente desprevenido e indefenso.
En ese contexto, Carlos Omar Llaipén, aprovechándose de esta situación y en forma sorpresiva y sin riesgo para él, y sobre seguro, se dirigió hacia la víctima, llevando consigo un arma de fuego tipo rifle calibre 22 con mira telescópica. Su intención y voluntad fue matarlo. Por ello, disparó y el proyectil del arma de fuego, impactó en el lado derecho del tórax de Pedro Segundo Quilodrán, provocándole la muerte.