La tripulación denunció que embarcaciones no identificadas e acercaron a varios barcos de la Flotilla, algunas con las luces apagadas.
Los activistas aplicaron de inmediato los protocolos de seguridad ante una posible interceptación. Aunque estas naves se alejaron posteriormente, la Flotilla también reportó un «incremento de la actividad de drones» sobrevolando sus embarcaciones.
La Flotilla asegura estar acercándose rápidamente a la llamada «zona de riesgo».
La última comunicación indicaba que se encontraban a unas 120 millas náuticas de distancia de Gaza, aproximadamente 220 kilómetros de la costa, proyectando su llegada a esta zona en las próximas horas.
La inminente llegada ha provocado reacciones. El Gobierno de España informó que el Buque de Acción Marítima (BAM) enviado para apoyar a la Flotilla no entrará en la zona de exclusión establecida por el ejército israelí.
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El testimonio de un argentino a bordo de la flotilla que lleva ayuda humanitaria a Gaza
Por su parte, el Gobierno italiano comunicó que la fragata naval Alpino, enviada para asistir a los barcos, emitirá una última llamada a la tripulación cuando se encuentre a menos de 150 millas de la costa, dando la oportunidad de embarcar a quienes deseen regresar.
El barco Conscience, que fue atacado por drones en aguas de Malta en mayo, zarpó recientemente desde Otranto (Italia) para unirse a los otros barcos de la Flotilla.
En cuanto a la respuesta israelí, se fortalecen las versiones de que aviones y buques de la Armada de Tel Aviv se preparan para interceptar a la Flotilla Global Sumud en alta mar en las próximas 24 horas.
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El curso de la flotilla internacional con ayuda para Gaza
El plan, según fuentes, sería capturar a los activistas y conducirlos a un gran buque preparado para su traslado al puerto de Ashdod, en el centro de Israel, donde serán interrogados y deportados. Algunas fuentes israelíes incluso mencionaron la posibilidad de hundir algunas naves debido a la gran cantidad que no podrían ser remolcadas.
La misión de la Flotilla, que zarpó a principios de septiembre desde España uniéndose a embarcaciones de Túnez, Italia y Grecia, es considerada la operación marítima más importante de su tipo en los intentos de romper el bloqueo, aunque ninguna de las flotillas previas ha logrado penetrar en las aguas territoriales de Gaza.
Finalmente, el Papa León XIV manifestó su inquietud ante la situación: «Espero que no haya violencias con la Flotilla», dijo a periodistas.