Las vertientes cancioneras encarnadas por la dupla Camila-Campodónico-Mariano Ferreyra y Anto Pi, el testimonial canto a capella de Mercedes Akel, el broche folclórico de Juan Falú y la encendida presentación de pulso rockero de Nahuel Amarilla, trabajador de Télam y voz cantante de la banda La Perra que los Parió, completó un domingo de músicas, encuentros y abrazos.
Marcedes Akel evocó la poesía de Antonio Tejada Gómez, Anto Pi demostró la originalidad de los artistas de la nueva escena, mientras que Camila Campodónico y Mariano Ferreyra invocaron a la voz de Violeta Parra, que supo ser la de un continente insurgente.
Nahuel Amarilla, trabajador de la agencia Télam y cantante del grupo rockero La Perra que los Parió, también fue protagonista. “Porque nunca podrán silenciar mi voz/Porque siempre voy a mantenerme en pie/Porque ya van a venir como vampiros/Sonriendo y jurando ser tu salvador/Porque esa gente solo entiende de billete/Nada sabe de pasión”, cantó para sus compañeras y compañeros.
El tucumano Juan Falú fue el responsable del cierre.
Comenzó con “Bando”, una canción inspirada en en el Bando que leyó el general San Martín al Ejército de los Andes. Algo de aquella patria que todavía no nacía se pierde con el cierre de la agencia pública. “El Estado no puede renunciar a sus medios”, dijo Falú.
El guitarrista entregó un himno, la “Chacarera del ‘55” y dos obras que no tienen registro oficial y que fueron parte en 2019 de una “Cantata a Tucumán”. Fueron la “Vidala de la tierra y el llanto” y el bailecito “Pa´ que nadie se quede atrás”.
“Vamos a volver”, dijo el tucumano al inaugurar su sesión.
La frase sobrevoló entre los presentes. Para algunos fue una promesa, para otros una premonición, o tal vez una certeza.