Las grandes cerealeras, que habían apoyado abiertamente las modificaciones que planteó el gobierno en la Ley Ómnibus porque les permitía competir en el mercado interno hasta ahora reservado a las pymes, quedaron pasmadas luego de conocerse por este medio la reunión que organizó Chirillo.
Como publico este medio, el secretario de Energía delegó las negociaciones en Luis de Ridder, ex gerente de Tecpetrol -la petrolera de Paolo Rocca- y uno funcionario de sus funcionarios de mayor confianza que reunió este jueves a empresarios cercanos al gobierno para pulir un DNU para una nueva regulación en el sector de biocombustibles.
Según se desprende del encuentro, la iniciativa cedería a Eduardo Eurnekian un parte importante de la producción de biodiesel en la Argentina dejando de lado a las grandes agroexportadoras -las industria integradas porque abarcan toda la cadena productiva- y también a las pymes.
[Chirillo negocia con Eurnekian y otros grandes un DNU para regular el mercado de biocombustibles]
Luis De Ridder es amigo de Hilarion del Olmo, CEO de Explora, empresa de biodiesel en Santa Fe, que fue acompañado por Erik Bazarian sobrino de Eurnekian -y presidente de Unitec Bio, empresa de biocombustibles del holding Corporación América- para conversar sobre el nuevo DNU.
Tras conocerse la reunión, una importante fuente del sector agroexportador al borde del desconcierto, señalaron a LPO que «cualquier cosa que no sea competencia implicará discrecionalidad y por ende, más costos que deberá pagar el consumidor».
En paralelo, le saca mayor competitividad a la economía; «para crecer necesitamos salir de esquemas prebendarios y jugar con las reglas que tienen en el resto del mundo», sostuvo la misma fuente.
Es que por los convocados por Energía para hablar de biocombustibles, no solo están vinculados al grupo de Eurnekian sino también al sector petrolero que viene empujando para quedarse con la producción del biocombustible obligatorio en el mercado interno.