Nacido en Santiago del Estero en 1942, Leo Dan se convirtió en uno de los mayores exponentes de la música romántica en América Latina. Éxitos como «Cómo te extraño, mi amor» y «Esa pared» quedaron grabados en el corazón de millones de personas, consolidándolo como un símbolo de la música popular.
Con más de 50 años de trayectoria y una obra que trascendió fronteras, Leo Dan deja un legado artístico imborrable. Su música, cargada de sentimiento y poesía, seguirá sonando en cada rincón donde el amor y la nostalgia encuentren un espacio.
Leopoldo Dante Tevez, más conocido como Leo Dan, falleció a los 82 años ayer y brindó su última entrevista a Radio Rivadavia el 22 de diciembre pasado: en el diálogo aseguró que deseaba regresar a su país natal: «Aún no me despedí de la Argentina, tengo ganas de volver».
Con más de 40 millones de discos vendidos, el reconocido cantante y autor fue uno de los mayores íconos de la música latinoamericana.
Aunque vivía en Estados Unidos con su mujer y cuatro hijos, en el diálogo con Alejandra Rubio había dejado abierta la posibilidad de una despedida con su público nacional.
«Yo ya no quería cantar más, me iba a dedicar solo a componer, pero creo que ahora voy a hacer un show en Argentina. No puedo adelantar mucho porque estamos aún en conversaciones para hacerlo y no está todo firmado. Pero, la despedida de octubre pasado, no será la última si Dios así lo quiere», había contado el intérprete santiagueño, que logró un Grammy como mejor compositor.
«El adiós a una leyenda» fue la última gira con la que Leo Dan comenzó a despedirse de la música y llegó a su fin con un imponente concierto en California.