El verano y el sol llegaron para quedarse. La temporada más calurosa ya toca nuestra puerta. Por eso, lo mejor es cambiar algunos hábitos para que el calor no te juegue en contra. Si tienes piel grasa, es importante que sigas estos simples consejos para evitar que tus poros se obstruyan o que la grasa se apodere de tu piel. Ya sabes, la clave está en mantener la constancia y volver estos consejos parte de tu rutina diaria.
1. Lava tu cara dos veces al día
Para mantener una piel limpia, es imprescindible lavar el rostro al levantarse y antes de dormir. El sudor de la noche puede obstruir los poros tanto como la contaminación y el maquillaje al que expones tu piel. Es aconsejable mantener una buena higiene diaria para reducir la cantidad de sebo y eliminar las bacterias y suciedad que la dañan.
2. ¡Protégete del sol!
Usa protector solar ligero o una loción hidratante leve con protector UV que puedas usar a diario. Puedes echar un vistazo a los cosméticos Nu Skin. Esta marca tiene varias opciones para tu tipo de piel que puedes probar. La exposición al sol aumenta la transpiración de la piel generando más suciedad, que luego pueden obstruir tus poros, transformándose en espinillas o puntos negros.
3. Cambia tu base de maquillaje por una BB cream con color.
Las bases pueden llegar a ser muy pesadas, en climas cálidos terminan tornando tu rostro muy brillante y oleoso. Es por eso que las BB cream son lo mejor para esta temporada, ellas hidratan y protegen tu piel al tiempo que emparejan el color de ciertas áreas. Si no tienes una de estas, ¡olvídalo! Es mejor que no apliques nada y dejes a tu cara respirar.
4. Mantén una alimentación saludable
Aumenta el consumo de alimentos frescos, vegetales y productos que contengan grandes cantidades de agua, esto puede reducir la producción de sebo en tu piel y mantenerla hidratada. Los alimentos picantes, frituras y procesados pueden incrementar la grasa en tu rostro, evítalos.
5. Exfolia tu piel una vez por semana
Consigue productos exfoliantes recomendados por expertos para sacar la piel muerta y toda la contaminación que se ha aferrado a tus poros. Esto contribuye a eliminar desechos y estimula la producción de piel nueva, disminuye dramáticamente el contenido de grasa en el rostro, dándole oportunidad para regenerarse. Si prefieres métodos naturales, siempre puedes apostar por mascarillas a base de café, azúcar o avena que pueden darte una mano para remover eso que ya no necesitas.